Trabajo presentado en el: I Congreso Internacional de Actualización y Cuidados de Enfermería en Urgencias Vitales, como trabajo de tipo Revisión Bibliográfica.
ELBA ROMERO SAIZ
PABLO PEREZ DE LAS HERAS
La bradicardia es definida como una frecuencia cardiaca por debajo de 60 pulsaciones por minuto. En muchas ocasiones una baja frecuencia es asintomática, pero resulta frecuente que no sea bien tolerada sobre todo en pacientes mayores de 65 años, donde la bradicardia sintomática es un motivo frecuente de consulta.
El corazón posee un marcapasos natural (nodo sinoauricular), las células de este marcapasos tienen un ritmo intrínseco, es decir se inician por sí solas, cuando este marcapasos natural deja de funcionar, se inician otros mecanismos de conducción eléctricos, si la velocidad de descarga es más lenta que la del nodo sinoauricular podemos hablar de una bradiarritmia.
Un marcapasos artificial es un dispositivo que estimula el corazón para producir la despolarización del mismo consiguiendo una contracción y gasto cardiaco adecuados.
Existen muchos tipos de marcapasos, dependiendo de su duración, se pueden clasificar en temporales o permanentes, dentro de los temporales encontraremos los transcútaneos, epicárdicos, esofágicos y transvenosos.
En esta revisión bibliográfica nos centraremos en el marcapasos temporal transcutáneo, ya que es el más rápido y accesible para servicios de urgencias y emergencias.
Conocer la utilidad y el funcionamiento del marcapasos temporal transcútaneo.
Se ha realizado una revisión bibliográfica. Para ello, se ha llevado a cabo una búsqueda bibliográfica acerca del marcapasos externo transcútaneo en distintos buscadores como Google académico y metabuscadores como Exploraevidencia y Plinio. También se han consultado distintas bases de datos electrónicas, en concreto Cochrane, Pubmed, Dianlet, Scielo y Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Además, se ha completado la información revisando libros de anatomía, fisiología, emergencias y paciente crítico. Finalmente, también se ha navegado por las principales páginas web de las instituciones más importantes relacionadas con esta especialidad clínica, tales como, la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC), el Consejo Europeo de Resucitación (ERC), y la American Heart Association (AHA).
Las palabras clave utilizadas fueron “marcapasos externo”, “emergencia”, “marcapasos transcutáneo”, “bradicardia” unidas por el operador AND. Por otro lado, “marcapasos externo” AND “emergencia” y “marcapasos externo” AND “bradicardia”.
Los criterios de inclusión de la búsqueda bibliográfica han sido, por un lado, aquellos artículos sobre marcapasos en español e inglés, estudios acerca de indicaciones y complicaciones del marcapasos transcutáneo, estudios sobre el conocimiento de la enfermería de este elemento, y artículos sobre la técnica de colocación del dispositivo. Se han excluido de los resultados aquellos artículos a los que no se pudo acceder al texto completo, así como aquellos que se centraban exclusivamente en el ámbito de unidades de cuidados intensivos, así como en los marcapasos definitivos.
La bradicardia, es un motivo frecuente de consulta en los servicios de urgencias y emergencias, esta patología puede ser detectada de forma espontánea en un examen rutinario, o bien por que el paciente presenta alguna sintomatología lo que le hace demandar asistencia médica.
Las bradicardias presentadas por los distintos pacientes suelen estar debidas a distintos motivos:
15% alteración primaria en el sistema de conducción.
40% síndrome coronario agudo.
20% bradicardias secundarias a fármacos.
5% causas metabólicas.
2% problemas con marcapasos permanentes.
13% otras causas.
Es importante saber reconocer las diferentes causas que pueden llegar a provocar una bradicardia o bradiarritmia patológica, conocer sus posibles tratamientos para poder realizar un tratamiento rápido y efectivo, antes de que pueda desencadenar en una situación más grave e incluso en una parada cardiorrespiratoria.
En servicios extrahospitalarios o de urgencias donde no exista la posibilidad de trasladar al paciente a otro servicio cuando la bradicardia comienza a comprometer la vida del paciente, para que le sea implantado un marcapasos transesofágico, transvenoso o uno definitivo de manera urgente, debemos conocer la medicación y el uso del marcapasos temporal transcutáneo para mejorar la contractibilidad y el gasto cardiaco.
Marcapasos temporal transcutáneo.
El uso de los marcapasos es algo relativamente reciente, fue en los años 30 cuando se desarrolló el primer marcapasos artificial, que utilizaba una aguja transtorácica para estimular el corazón. Pero no fue hasta los años ochenta cuando se consiguió crear un marcapasos capaz de aumentar o disminuir la frecuencia de estimulación dependiendo de las necesidades de cada paciente.
Respecto al marcapasos transcutáneo, fue desarrollado por la casa Zoll®, en los años 50 lo que solucionaba la dificultad de utilizar una técnica invasiva, y ponía los principios a una técnica rápida y efectiva.
Pero no fue hasta finales de los años 90, cuando los marcapasos fueron incorporados a los monitores desfibriladores, reduciendo su peso y pudiéndose trasportar de una manera fácil siendo accesibles a servicios de emergencia extrahospitalaria.
Según indican las últimas guías actualizadas, cuando una bradicardia o bradiarritmia no sea bien tolerada por un paciente, debemos intentar controlarla con medicación, la atropina es el fármaco de elección, administraremos por vía intravenosa o intraósea 0,5 mg de atropina, repitiéndose cada 3-5 min, si la dosis anterior no fuera efectiva hasta un máximo de 3 mg. No aplicar atropina en pacientes con trasplante cardiaco, su corazón están desnervados y no responden al bloqueo vagal de la atropina.
Si la bradicardia con sintomatología adversa continúa después de la atropina se debe considerar la implantación del marcapasos transcutáneo. Los fármacos de segunda elección como el isoproterenol adrenalina o dopamina, se utilizarán únicamente si no disponemos de marcapasos transcutáneo.
El marcapasos transcutáneo, tiene grandes ventajas ya que se puede colocar rápidamente, es fácil de trasportar y requiere un mínimo entrenamiento ya que puede ser iniciado por servicios de emergencia hasta la llegada a un centro donde sea posible la colocación de un marcapasos transvenoso o definitivo, según indicación médica.
La principal complicación de este dispositivo, es la incomodidad en un paciente consciente ya que las contracciones son dolorosas y producen un malestar directo que hacen que en muchas ocasiones necesitemos sedo-anlagesiar al paciente.
Colocación del marcapasos:
Utilización del marcapasos una vez colocado: