Queridos compañeros lectores de NPunto.
Como adelantábamos en el anterior número, también éste está dedicado a las urgencias y, como no puede ser de otro modo, con cinco temas de máximo interés y actualidad. El primero de ellos lleva por título Control de la temperatura tras parada cardiorrespiratoria. Contexto de aplicación de la hipotermia terapéutica. Con la aplicación de tratamiento precoz por parte de los servicios de emergencias extrahospitalarios, alrededor de un 30% de estos pacientes presentan retorno a la circulación espontánea y son trasladados a un centro hospitalario. De todas formas, muchos pacientes permanecen comatosos tras la recuperación del latido cardíaco, debido a lesión cerebral secundaria a la hipoxemia, siendo ésta la principal causa de muerte tras la admisión hospitalaria. Aunque la hipotermia terapéutica (HT) ha sido un tratamiento post-parada cardiorrespiratoria desde los años cincuenta, no es hasta la década de los noventa cuando se comienzan a comprender los verdaderos beneficios de la misma y se acuña el término hipotermia moderada (“mild hypothermia”) para referirse al mantenimiento del paciente crítico entre 32 y 34ºC. Debido a su efecto protector sobre el cerebro y el miocardio, la HT ha sido ampliamente estudiada en pacientes con paro cardiaco en coma tras la RCE, así como en pacientes con infarto agudo de miocardio. Los autores analizan el beneficio de la aplicación de las actuales guías sobre el tema.
No menos interesante es el segundo artículo, Prescripción enfermera en urgencias y emergencias. El objetivo general del trabajo es buscar y analizar la información disponible sobre la prescripción enfermera en la actualidad. Esta revisión de la bibliografía se ha realizado revisando todas las publicaciones relacionadas con la prescripción enfermera que se publicasen entre los años 2000-2016, accediendo de esta forma a diversas bases de datos como son PudMED, Cochrane, MEDLINE, SciELO entre otras. Los profesionales enfermeros para indicar y dispensar medicamentos y productos sanitarios siguen el “proceso de terapéutica razonada” que recomienda la OMS, para así de esta forma garantizar que la prescripción farmacológica se realice de una forma segura y efectiva. Hay tres modelos básicos de prescripción enfermera que analizaremos bajo un enfoque práctico de actualidad.
Continuamos con el Papel de la enfermería en la sedoanalgesia del paciente crítico. El dolor no tratado y el infratratado representan uno de los problemas de salud más extendidos, empeorando a medida que la población envejece y acumulando el riesgo de dolor. La mayor parte de las opciones terapéuticas tienen un mecanismo de acción determinado pero no se pueden prescribir en dosis ilimitadas ya que su eficacia tiene un límite. El tratamiento del dolor todavía no ha alcanzado la sinergia que debería conseguirse a través de un enfoque completo e integrado de la investigación, el diagnóstico y el tratamiento del dolor. Se plantean varios retos entre ellos una apreciación más profunda de la interrelación entre los sistemas nerviosos central y periférico en la percepción del dolor, una mayor toma de conciencia de los múltiples mecanismos subyacentes a la transmisión, facilitación e inhibición del dolor, así como una clara identificación de las barreras existentes dentro de los sistemas sanitarios mundiales, y entre los profesionales sanitarios, para evaluar y tratar correctamente el dolor. La asistencia de un paciente en una UCI demanda a la enfermería un abordaje específico por las características y las dificultades del propio enfermo. El personal enfermero tiene un papel activo organizando los fármacos sedoanalgesiantes solicitados por el facultativo, la dosis que necesite el paciente, su monitorización y mantenimiento en cada caso, control de parámetros, detección temprana de problemas etc. Todo ello hace que el personal enfermero forme un grupo de trabajo fundamental para el manejo de estos pacientes.
Terminamos este número 16 de NPunto con Barreras percibidas por enfermería en servicios de urgencias a la población inmigrante. Repercusiones en pediatría
En España, según datos del INE, en 2010 se registró un 14% de la población total procedente de otros países, es decir 5,7 millones de personas. En 2013 el 9,56% de la población era extranjera. En Barcelona en concreto (INE, 2015), esta cifra es sensiblemente superior alcanzando el 16%. En este contexto es indispensable para mejorar los servicios de la población, no sólo construir infraestructuras o ampliar la cobertura de los servicios prestados, sino que éstos sean seguros y sensibles a la diversidad cultural. La importancia que tiene este proceso en el paciente pediátrico es muy elevada y las analizamos en este artículo.
Confiamos que, como siempre, sean temas prácticos para todos vosotros que podáis tomar vuestras propias conclusiones antes del merecido descanso estival sino lo estáis tomando ya. Sea de un modo u otro, os deseamos paséis unos días de desconexión profesional en la medida que podáis.