En los últimos años la prevalencia en la realización de ostomías ha aumentado, sigue creciendo y se prevé que continúe haciéndolo en un futuro.
Las ostomías producen cambios a nivel físico y psicológico difíciles de asumir en la vida en el paciente. La manera de afrontar estos cambios marca la clave para aprender a vivir con ellos. Todo esto hace que la enfermería cobre un papel principal en la atención al paciente ostomizado puesto que somos el personal de referencia en el cuidado de estos pacientes.
Los cambios en la sexualidad son uno de estos cambios difíciles de afrontar, muchas veces por los problemas de comunicación que generan mitos y miedos en el paciente.
A lo largo de este trabajo se han tratado de analizar los problemas que ocasiona una ostomía en la sexualidad y los cuidados de enfermería necesarios para resolverlos.
El conocimiento de las complicaciones ocasionadas por una ostomía por parte del personal hace que la trasmisión de información al paciente y familiares sea más eficaz y en muchas ocasiones pueda evitar alguna de estas complicaciones, o si es el caso que ya han aparecido, se pueda producir la recuperación de las mismas de manera precoz y eficaz.
Palabras clave: Sexualidad, paciente ostomizado, ostomía.
In recent years, the prevalence of stoma surgery has increased and continues to grow.
Ostomies produce physical and psychological changes in the patient´s life that are difficult to assume. The way to deal with these changes is the key to learning to live with them. All of this makes the nursing profession take on a major role in the care of the ostomate patient, since we are the reference personnel in the care of these patients.
Changes in sexuality are one of these difficult changes to face, many times because of the communication problems that generate myths and fears in the patient.
Throughout this work we have tried to analyze the problems caused by an ostomy in sexuality and the nursing care necessary to solve them.
Knowing the complications caused by an ostomy by the professionals makes the transmission of information to the patient and family members more effective and, in many occasions, can avoid some of these complications, or if it is the case that they have already appeared, recovery from them can occur in an early and effectively.
Key words: Sexuality, ostomy patient, ostomy.
Una ostomía es aquella intervención quirúrgica cuyo objetivo es crear una comunicación artificial desde una víscera hueca con el exterior. Esa apertura de llama estoma y permite eliminar productos de desecho.
Fuente: StayWell K. University of Minnesota Health. 2019
Existen varias clasificaciones de las ostomías (Anexo 1) siendo las más importantes:
Según su función podemos clasificar las ostomías en ostomías para nutrición, ventilación, eliminación o de drenaje. Según su permanencia: temporales o permanentes y según el órgano donde se realice el estoma se diferencian urostomía, colostomía, ileostomía, yeyunostomía, gastrostomia etc.
Dentro de las ostomías intestinales, dependiendo del nivel donde se realice recibe uno u otro nombre, de tal manera que existen duodenostomías, yeyunostomías, ileostomías o colostomías y siendo la consistencia de las heces diferente en cada tramo (Anexo 2).
El cáncer es la segunda causa de muerte en el mundo tras las enfermedades función cardiovasculares. En el año 2015 causó un total de 8.8 millones de muertes en todo el mundo, siendo el cáncer colorrectal el tercer tipo de cáncer que más muertes ocasiona anualmente (774.000 muertes/año). (2)
En España las estadísticas varían un poco, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el año 2018 el cáncer es la primera causa de muerte en hombres. De las 112.714 defunciones anuales por cáncer en España, 11.265 corresponden al cáncer colorrectal siendo el segundo en incidencia en hombres y el tercero en mujeres (3).
Fuente: Instituto Nacional de Estadística (INE). 2019
El cáncer colorrectal (CCR) es aquel que se localiza en el intestino grueso, pudiendo ubicarse desde la válvula ileoceal hasta el recto y pudiendo afectar a los diferentes segmentos del colon (4). Es la causa principal por la que se lleva a cabo una ostomía digestiva pero no la única. Otras son las enfermedades congénitas, las malformaciones y obstrucciones intestinales, traumatismos o enfermedades inflamatorias intestinales (5).
En España hay más de 700.000 personas con ostomías. Cada año se realizan unas 16.000 ostomías nuevas siendo las colostomías las que se realizan con mayor frecuencia (55%) siguiéndose de ileostomías (35%) y realizándose en todos los grupos de edad. (5-6)
La enfermería adquiere un papel principal en la atención a estos pacientes, y debe proporcionarles cuidados de calidad, de manera holística e individualizada y basados en la evidencia científica actual, de esta manera fomentará la independencia del paciente ostomizado aumentando su calidad de vida y la de sus familiares o cuidadores.
El concepto de sexualidad ha existido siempre aunque no siempre se ha precisado de una definición concreta, de hecho, no es hasta los años 70 cuando desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) comienza a abordar temas relacionados con ella como es la educación.(7)
Según la Organización Mundial de la Salud, la salud sexual “es un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia” (8) y cuando se refiere a sexualidad “Abarca el sexo, las identidades y los roles de género, la orientación sexual, el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción. Se siente y se expresa a través de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, comportamiento, prácticas, roles y relaciones” (7).
En 1997, en Valencia, se crea la Declaración del Congreso Mundial de Sexología – revisada y aprobada en 1999 en el XV Congreso Mundial de Sexología (Hong Kong)- en ella se declaran los once derechos sexuales que todas las personas tenemos (Anexo 3). Se trata de once derechos humanos fundamentales y universales que se basan en la libertad, la igualdad y la dignidad propias de todo ser humano. Puesto que la salud es un derecho fundamental nada hace pensar que la salud sexual no deba serlo también puesto que es esencial para el bienestar individual, interpersonal y social.
El hecho de ser un paciente portador de una ostomía no elimina la necesidad de mantener una vida sexual plena o recuperar la salud sexual.
Después de la realización del estoma, las acciones que se llevan a cabo tras el alta hospitalaria van encaminadas a enfrentar la recuperación quirúrgica, la enseñanza para el autocuidado y se centran en la patología que ocasionó la realización del estoma sin tener en cuenta, en la mayor parte de los casos, que los factores que más preocupan a los pacientes son adaptarse al cambio corporal, la alteración en su vida sexual y el cambio que la propia ostomía produce en su vida social. (9)
Pese a que casi tres cuartas partes de los pacientes ostomizados refieren tener una vida sexual insatisfactoria no suele tratarse ni prevenir el impacto que una ostomía produce sobre la vida sexual. (9). Este problema puede producirse por un lado por la evidente carencia de formación del personal de enfermería para el abordaje de temas relacionados con la sexualidad tras la realización de una ostomía y por otro por otra serie de barreras que dificultan a los pacientes para hablar abiertamente de su sexualidad como puede ser la timidez o la vergüenza.
Las ostomías se han tratado siempre desde una perspectiva quirúrgica centrándose en la recuperación física tras la sin prestar la atención debida a la perspectiva social, psicológica y cultural. Dentro de este aspecto las ostomías afectan a la autoimagen, a la integridad corporal, la autoestima y la capacidad de relacionarse socialmente influyendo de manera directa en las relaciones y la vida sexual.
La mayor parte de los pacientes con ostomías refieren tener una vida sexual insatisfactoria pero los cuidados, artículos e investigaciones sobre este campo se centran principalmente en la intervención quirúrgica (recuperación, autocuidado, patología previa…) existiendo un bajo número de estudios que traten sobre la sexualidad del individuo u otros aspectos psicosociales que se ve alterados en el individuo ostomizado.
Las relaciones sexuales y la intimidad son aspectos importantes y de plenitud que deben reanudar después de una cirugía de ostomía, (10) pero existen numerosos problemas que lo dificultan. Dada la alta incidencia de problemas sexuales en los pacientes ostomizados, la falta de información que existe –y que los propios pacientes manifiestan- y el papel que juega la enfermería al ser el personal encargado de detectar, tratar, informar y educar al paciente con ostomías, es necesario llevar a cabo una revisión bibliográfica sobre los problemas en la sexualidad del paciente ostomizado para poder proporcionar información actualizada basada en la evidencia con el fin de que el personal de enfermería pueda proporcionar cuidados centrados en la educación, asesoramiento y apoyo sanitario adecuado en relación con la sexualidad.
Tras la realización de la ostomía, todo el ámbito sexual del paciente se ve afectado de manera importante. Esto puede suceder porque la propia intervención, la enfermedad que la ocasionó o los tratamientos recibidos (como quimioterapia y otros medicamentos) pueden hacer que el paciente sienta debilidad, disminución del deseo sexual, anulación de la erectilidad.
Todo ello no implica que la persona ostomizada deba dejar su sexualidad a un lado, independientemente s mantiene una vida sexual activa o tiene pareja estable.
Existen diferentes tipos de causas por la que la sexualidad se ve afectada. Algunas son físicas (extirpación de órganos o nervios relacionadas con la función sexual, otras psicológicas (todo el conjunto de emociones negativas que implica la ostomía como la ansiedad), factores sociales (aquellos implícitos en las cuestiones culturales, morales, o alores inculcados desde la infancia) o incluso problemas que ya existían en la pareja que están más presentes tras la realización de la ostomía. Otros problemas que influyen son la falta o exceso de información, los mitos, el sentimiento de vergüenza o los problemas de comunicación dentro de la propia pareja o entre los profesionales y la persona ostomizada.
La cirugía de ostomía afecta a la sexualidad tanto de hombres como de mujeres. (Anexo 4).
Los factores que influyen en la vida sexual y las consecuencias físicas que ocasiona la intervención quirúrgica dependen de:
Cuando hablamos de la mujer ostomizada suele ser común que además de la debilidad generada por la propia intervención quirúrgica exista un acentuado impacto emocional debido al cambio que la ostomía genera en el cuerpo que pese a haber curado o mejorado un problema grave de salud ocasiona en sentimiento de duelo que es necesario resolver en un tiempo más o menos prudencial.
Además del importante componente psicológico por el que la salud sexual se ve afectada hay que resaltar los posibles efectos físicos que la intervención ocasiona.
Cuando se realiza una ostomía en una mujer este dolor suele estar relacionado con la propia recuperación de los tejidos de la pelvis tras la intervención ya que se necesita un tiempo hasta la recuperación completa. Otra causa puede ser la sequedad vaginal o la variación en el tamaño de la vagina tras la cirugía.
El propio dolor en las relaciones sexuales hace que la mujer no pueda tener un encuentro sexual pleno que puede derivar en temor que complique aún más las relaciones sexuales.
Para solventar esto parecen ayudar: el empleo de lubricantes, la estimulación manual, movimientos suaves en la penetración, un ambiente relajado, la toma de analgesia previa a las relaciones sexuales.
Con frecuencia la zona de entrada a la vagina puede tener hipersensibilidad y cualquier contacto puede producir dolor. Dependiendo de la intensidad se tratará de una u otra manera: el lubricante anestésico puede ser suficiente para el tratamiento del dolor leve. Para dolores más intensos se deberá consultad a un profesional.
Puede causar problemas sexuales desde el aspecto físico o psicológico. Los más comunes son la ausencia de erección, problemas en la eyaculación y miedo a fracasar. Tras la intervención quirúrgica el deseo sexual también se ve disminuido pero suele recuperarse con el tiempo y la recuperación.
Los nervios y vasos sanguíneos de la pelvis pueden verse alterados o seccionados tras la cirugía. Estos nervios son los encargados de llevar el impulso nervioso del cerebro al pene, si están alterados la erección puede perder rigidez o no aparecer.
Esta alteración de los nervios y vasos sanguíneos suele aparecer mas comúnmente en las intervenciones de cáncer de recto que en las intervenciones de otras patologías como colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn.
La disfunción eréctil puede afectar también de manera psicológica que contribuye al aislamiento del hombre en un momento que de por sí no es fácil para él ya que debe adaptarse a la nueva situación.
En ocasiones, sobre todo en intervenciones del intestino, el problema evoluciona favorablemente mejorando en el primer año tras la operación, en otros casos (cuando se extirpa la vejiga y /o próstata) la disfunción eréctil permanece y no se recupera en su totalidad la capacidad eréctil del miembro viril.
La edad es un factor importante en la recuperación, cuanto más joven es el hombre mejor será el pronóstico de recuperación.
Otros factores que pueden influir negativamente para la aparición de disfunción eréctil son las enfermedades crónicas, conflictos en la pareja, tabaco, alcohol, radioterapia, quimioterapia o estrés.
Para enfrentarse al problema el hombre debe crear u ambiente de tranquilidad, en el que deje de lado el agobio, no se desprecie a sí mismo y no se deje influenciar por los mitos sociales que rondan en torno a la eyaculación. Si con un tiempo lógico tras la intervención (al menos un año) el problema sigue apareciendo deberá consultar con un especialista que indique un tratamiento específico (ayuda psicológica, tratamiento hormonal, fármacos, inyección intracavernosa en el pene, prótesis de pene)
Si en la cirugía se han extirpado la próstata y las vesículas seminales existe una ausencia de eyaculación ya que el semen no puede salir al exterior. No es perjudicial para el hombre aunque de manera psicológica puede afectarle. El apoyo de la pareja es fundamental para afrontar este hecho. Ambas (eyaculación retrógrada y ausencia de eyaculación) anulan la fertilidad en el hombre.
El apoyo de personas del entorno (familiares, amigos y pareja en el caso de tenerla) durante la enfermedad resulta beneficioso, especialmente cuando se produce un cambio físico y emocional como es el caso de la realización de una ostomía.
No cabe ninguna duda que es el propio paciente el que debe tomar las decisiones y el que atraviesa la situación más difícil; lo normal es que comparta la información con su familia y/o pareja, que le acompañen en las consultas o que recurra a ellos a la hora de tomar decisiones importantes. En el otro extremo existen casos en los que el propio paciente prefiere evitar el sufrimiento a su pareja y/o familia alejándolos de todo lo que implica su enfermedad.
Debido a los beneficios que existen cuando el paciente no enfrenta solo el proceso este debe establecer una relación de confianza y buena comunicación donde pueda pedir lo que necesite a las demás personas, compartir las emociones y sentimientos que le inquietan o le preocupan o incluir a su pareja en la toma de decisiones escuchado también las inquietudes y miedos de las demás personas respecto a su estado de salud o sexualidad en el caso de su pareja.
Se requiere que pase un tiempo para adaptarse a los cambios que la ostomía ha supuesto para l apersona y para que ésta se vuelva a encontrar bien consigo misma. Una buena idea para recuperar la confianza perdida con uno mismo y conocer de nuevo el propio cuerpo es comenzar a tocarse y satisfacerse uno mismo, con ello el paciente ostomizado descubrirá lo que le da placer y lo que no para, pasado u tiempo, poder enseñárselo a su pareja.
Es necesario tomarse la práctica sexual con tranquilidad, sinceridad, basándose en el cariño y teniendo una mentalidad abierta hacia nuevas prácticas en las que se genere y se reciba placer. Es importante no tener prisa, y que la práctica sexual no se genere en un momento en el que la pareja se encuentre cansada o se tenga dolor físico.
Tras la cirugía puede resultar útil retomar la práctica sexual con caricias en la que cada miembro de la pareja toque el cuerpo del otro.
Puesto que es necesario modificar la rutina sexual tras la realización de la ostomía, será necesario también hablar de sexo y mantener una comunicación abierta donde se puedan exponer todas las cuestiones y temas que preocupan a un miembro u otro dentro de la pareja. La adaptación a la práctica sexual tras la ostomía se conseguirá con información clara, y recíproca dejando a un lado la vergüenza y expresando con máxima sinceridad lo que a uno le gusta o no le gusta.
La preparación previa al sexo para la persona ostomizada no difiere de la del resto de las personas. Esta preparación puede incluir las acciones encaminadas a hacer que la persona se sienta atractiva como un baño, el empleo de prendas atractivas, el condicionamiento del ambiente como el empleo de luz tenue, velas etc. Todo esto incluye dejarse llevar por el deseo y los sentimientos intentando marcar la distancia con la preocupación que ocasiona la ostomía y la propia bolsa colectora.
Tras la cirugía, en los primeros encuentros sexuales es común que aparezca un sentimiento de preocupación relacionado con el temor a hacer daño a la persona ostomizada (por ejemplo en la penetración). Otro temor infundado se produce cuando la preocupación se orienta en temer que el dispositivo colector se desplace. La persona ostomizada debe ser la encargada de comunicar a su pareja que ni el movimiento ni el contacto estrecho supone riesgo de lesión y que la mayor parte de posturas sexuales no alterarán la fijación de la bolsa colectora.
El mantenimiento de una correcta higiene en la ostomía es imprescindible, pero aún es más importante si se prevé que vaya a haber relaciones sexuales ya que esto marcará la confianza durante el encuentro sexual. Para ello pueden seguirse las siguientes pautas:
A muchas personas ostomizadas la bolsa colectora les supone un impedimento para la adecuada relajación y entrega durante las relaciones sexuales. Este problema suele estar presente hasta que la persona maneja la ostomía y los dispositivos que tiene que emplear y se da cuenta que la bolsa aguanta las relaciones sexuales sin ningún impedimento.
Algunas personas ocultan la bolsa bajo prendas de ropa intima que pueden proporcionar (sobre todo en la mujer) mayor seguridad a la hora de mantener relaciones sexuales.
Existen otros dispositivos como fundas que cubren las bolsas poniendo un toque de color que suaviza el ambiente volviéndolo más relajado.
Funda para ostomía.
Fuente: https://missbowel.com/producto/funda-estampada-con-triangulos/
El tiempo irá dotando a la pareja del aprendizaje donde vayan conociendo posturas que les satisfagan a ambos.
Fundación Ayúdate. La sexualidad en la persona ostomizada [cuaderno de información]. 2020.
Fundación Ayúdate. La sexualidad en la persona ostomizada [cuaderno de información]. 2020.
Fundación Ayúdate. La sexualidad en la persona ostomizada [cuaderno de información]. 2020
Fundación Ayúdate. La sexualidad en la persona ostomizada [cuaderno de información]. 2020
Puede ocurrir que a algunas personas les excite o produzca placer intentar penetrar o acariciar el estoma con el pene, conviene informar a la persona ostomizada que este acto puede ocasionar lesiones, y daño tanto en el intestino como en el estoma, incluso ocasionar hemorragias.
En ocasiones, debido a la cirugía la penetración no es posible. En estos casos, hay que enfatizar que el sexo sin coito es otra alternativa ya que el orgasmo, el placer y las relaciones sexuales satisfactorias no tienen que tener relación directa con la erección, la eyaculación o la penetración.
Los prejuicios, la presión social y la desinformación, puede hacer que los homosexuales oculten o vivan su homosexualidad de manera ambigua. A todo esto se añade los sentimientos negativos que afloran cuando se realiza una ostomía.
Los profesionales deben mantener una visión objetiva y neutral respecto a la orientación sexual de las personas, no cayendo en la homofobia y proporcionando a las personas homosexuales cuidados específicos frente a las necesidades específicas de salud que presentan.
Las personas homosexuales ostomizadas suelen afrontar mejor su sexualidad tras la realización de la ostomía, esto es así porque suelen ser más abiertas a la hora de afrontar y explorar la sexualidad.
Si la parte afectada al realizar la ostomía es el recto, puede verse perjudicada la penetración anal, por ello es precisa una valoración profesional por parte del cirujano donde se valoren las diferentes alternativas de tratamiento a la hora de seleccionar la técnica empleada y valorar los riesgos
La mujer seguirá siendo fértil en el caso de que ya lo fuera previa a la realización de la ostomía siempre y cuando no se afecte a la estructura/ órganos tras la ostomía, lo que implica que sea posible el embarazo aunque se recomienda que la mujer espere al menos 2 años tras la intervención quirúrgica para que el tejido afectado haya cicatrizado y se haya estabilizado.
Las principales causas que pueden alterar la fertilidad del hombre ostomizado son la quimioterapia, la radioterapia y la intervención quirúrgica en la pelvis que puede dañar nervios o vasos sanguíneos.
Si antes de la cirugía se conoce que la fertilidad puede verse perjudicada se puede conservar el semen en un banco de esperma para realizar después una técnica de reproducción asistida.
Si existe una eyaculación retrógrada se puede recuperar el semen para emplearlo después en una técnica de reproducción asistida.
Si el tratamiento ha anulado la capacidad para producir semen en los testículos no será posible la paternidad.
Normalmente las mujeres ostomizadas no se encuentran en edad fértil pero en determinados casos donde sí lo están se plantean ser madres tras la cirugía de ostomía. No existen causas médicas que contraindiquen el embarazo en una paciente ostomizada, la ostomía no suele suponer un problema en el embarazo, parto o postparto aunque hay que tener en cuenta la causa que motivó a realizarla.
Cuando la mujer quiere quedar embarazada encuentra la preocupación de si el embarazo podría perjudicar a la ostomía o a su salud por lo que se considera imprescindible recurrir a un médico especialista (ginecólogo/cirujano) que estudiará de manera individual cada caso y ofrecerá a la mujer toda la información necesaria de manera clara, con beneficios y riesgos existentes, morbilidad y explicará las posibles complicaciones que puedan existir.
Se recomienda que tras la realización del estoma se espere un tiempo prudencial para que los tejidos y los órganos cicatricen a la par que se consiga una estabilidad emocional tras adaptarse a la nueva situación. La mayor parte de los autores recomiendan esperar dos años antes de quedar embarazada pero es el propio médico el que valorará este tiempo en función de las características de la paciente y de la ostomía realizada. No suele recomendarse superar los dos embarazos.
Durante el embarazo se pueden producir una serie de cambios en el estoma:
Se debe vigilar el estoma durante el embarazo para percibir los cambios que pueda sufrir y prestar atención a la estabilidad y eficacia del dispositivo empleado por si es necesario cambiarlo como consecuencia del aumento del volumen abdominal.
Si no hay contraindicación el parto de una mujer ostomizada se realizará por vía vaginal indicándose cesárea si hubiera indicación o complicaciones (al igual que se hace en el resto de embarazos).
Tras el parto, se precisan los mismos cuidados que a cualquier otra mujer puérpera y se recomienda la lactancia materna de igual manera por los múltiples beneficios que ésta supone.
La mujer ostomizada debe recurrir a su ginecólogo para que éste valore el método anticonceptivo que mejor se ajuste a su nueva situación.
En el caso de la ileostomía o si en la cirugía se ha acortado el intestino no es recomendable los métodos anticonceptivos orales debido a que ésos se absorben principalmente en el intestino delgado y el efecto del anticonceptivo puede quedar reducido. Esto no ocurre en otros tipos de ostomías como son colostomías distales o urostomías.
Determinados métodos anticonceptivos como los dispositivos intrauterinos, anillos vaginales o diafragma pueden perder eficacia si se han causado modificaciones anatómicas o se ha alterado el funcionamiento de algunos tejidos implicados.
Las enfermedades de transmisión sexual son infecciones causadas por bacterias, parásitos y virus que transmiten de una persona a otra a través del contacto sexual.
La persona ostomizada que ha recibido tratamiento con quimioterapia o radioterapia tiene el sistema inmunitario debilitado, por lo que durante estos tratamientos puede ser más propensa a las ETS.
La mejor manera para evitar infectarse por alguna de las ETS que existen es la prevención. Adoptando medidas de higiene básicas (lavado con agua y jabón antes y después del acto sexual y de la defecación) y profilaxis (métodos barrera) se reduce notablemente el contagio de estas enfermedades.
Todos los seres humanos somos seres sexuados, este hecho no cambia tras la realización de una ostomía, pero es necesario adaptarse a la nueva situación para percibir la sexualidad como algo sano y provechoso aunque se hayan producido cambios en el propio cuerpo.
La sexualidad es un aspecto fundamental que contribuye a desarrollar una salud mental adecuada y a la realización personal. El hecho sexual humano no solamente incluye el acto sexual, va mucho más allá incluyendo emociones, necesidades, deseo, relación con el propio cuerpo, relación con los demás, experiencias vividas etc.
En el hecho sexual humano intervienen varios conceptos:
La mayor parte de los pacientes ostomizados refieren no haber recibido suficiente información por parte del personal hospitalario para poder resolver sus dudas acerca de la sexualidad.
Existen numerosos factores que pueden explicar que ocurra:
Existen varios factores que influyen en la adaptación del paciente a la ostomía: enfermedad que lleva a la realización de la ostomía, pronóstico de la misma, tipo de intervención, secuelas de la misma etc.
Todos los cambios a los que el paciente se ve sometido implican que se deba valorar al mismo desde una perspectiva holística, lo que en ocasiones implica un reto para los profesionales encargados de su salud.
La enfermera será la encargada de valorar la trascendencia que tiene la ostomía para cada paciente para poder, de esta manera, ofrecerle cuidados integrales, individualizados y de calidad ofreciéndole educación para la salud (EpS) en el preoperatorio, postoperatorio y tras el alta al paciente, no solamente al paciente sino también a sus familiares.
Será la encargada de apoyar al paciente en su diagnóstico, proporcionarle los cuidados tras la intervención, realizar educación para la salud, le ayudará a adaptarse a la nueva situación, a retomar sus relaciones sociales y abordará la sexualidad del paciente para hacer que el paciente goce de buena calidad de vida.
Por tanto su papel es esencial para que el paciente logre una integración y una adaptación adecuada, disminuyendo, gracias a su intervención en la recuperación del paciente, las complicaciones que puedan aparecer tras la realización de la ostomía, reduciendo por consiguiente los reingresos hospitalarios, las reintervenciones quirúrgicas y por ende el gasto sanitario.
Entre estos profesionales destaca la figura de la enfermera estomaterapeuta, una enfermera especializada en los cuidados integrales del paciente ostomizado que se encargará desde una formación especializada de proporcionar cuidados, EpS etc.
Para proporcionar este tipo de cuidados por parte de los profesionales se requieren unas habilidades que favorecerán la relación terapéutica:
Fuente: elaboración propia
Puesto que se debe proporcionar cuidados al paciente desde una perspectiva integral hay que prestar atención a la sexualidad. Se trata de un aspecto que suele verse afectado tras la realización de una ostomía. El abordaje de la sexualidad debe abordarse en la fase preoperatoria, postoperatorio tras el alta y en las posteriores consultas. La enfermera estomaterapeuta adquiere especial importancia nuevamente pero el resto de profesionales también pueden abordar este factor ofreciendo información y cuidados desde la evidencia científica y ofreciendo todo el apoyo que puedan proporcionar.
El abordaje de la sexualidad del paciente ostomizado por parte de los profesionales sanitarios es insuficiente, se trata de un aspecto muy íntimo de la persona que puede ser evitado por el profesional.
Desde la perspectiva enfermera se pueden observar los siguientes comportamientos que dificultan el abordaje de la sexualidad:
Abordar la sexualidad del paciente ostomizado, ya que es un aspecto fundamental en la vida de las personas, es una obligación que nos concierne como profesionales. No es una tarea sencilla puesto que abordar algo tan íntimo como la sexualidad requiere habilidades, entrenamiento y en ocasiones supone un reto para nuestras capacidades profesionales: es complicado tratar temas sensibles e íntimos de las personas que, por un lado, hacen al profesional revisar su disposición y conocimientos para enfrentarse a este ámbito y por otro, hay que enfrentarse a que en general, la mayor parte de las personas no tratan los temas sexuales con espontaneidad.
Para abordar la sexualidad del paciente podemos apoyarnos en las siguientes bases:
La enfermera estomaterapeuta es aquella que tiene una formación específica mediante la que ha adquirido unos conocimientos y competencias que le permiten ofrecer, junto con otros profesionales y de manera autónoma, asistencia y rehabilitación a las personas ostomizadas. Se encarga de proporcionar la información previa a la intervención quirúrgica, de la elección junto con el paciente de la ubicación del estoma, de proporcionarle información sobre cuidados del estoma, forma al paciente en el manejo del estoma, asesora de manera individual en la elección del dispositivo colector, y proporciona al paciente apoyo emocional.
En España no existe ninguna formación reglada oficial que de acceso a un título, la enfermera estomaterapeuta únicamente puede formarse en base a su experiencia, cursos y a algunos títulos propios que no dan acceso posteriormente a Doctorados.
Tras la realización de una ostomía, se producen una serie de alteraciones y secuelas derivadas de la cirugía. Cabe destacar que la calidad de cuidados que se apliquen durante el preoperatorio, perioperatorio y postoperatorio influyen de manera crucial en la incidencia de las secuelas derivadas de la ostomía. La enfermera será la responsable de estos cuidados y de la enseñanza de los cuidados que el propio paciente se auto proporcionará.
Para aplicar unos cuidados de calidad, es necesario realizar una valoración precisa donde se obtenga información acerca de todas las áreas que pueden verse influidas en el paciente ostomizado pudiendo anticipar así sus necesidades y problemas.
Los patrones funcionales de salud proporcionan un formato para la valoración del paciente y una base para establecer diagnósticos de enfermería.
En la valoración de cada patrón existen dos aspectos a valorar: la historia y el examen físico.
El paciente, familia o comunidad ofrecerá datos en forma de respuesta a las preguntas planteadas y el entrevistador obtendrá más datos mediante las observaciones realizadas en la fase de exploración.
La valoración por patrones funcionales de salud de Marjorie Gordon permiten obtener información de una forma sistemática en cualquier especialidad enfermera, grupo de edad o situación de salud enfermedad.
A lo largo de todos los patrones funcionales se abordan todos los ámbitos de la persona respecto a los cuáles, con posterioridad, se formularán los diagnósticos de enfermería. Si los datos indican que puede existir un problema, de riesgo o real (patrón disfuncional), se elabora una hipótesis diagnostica (diagnostico de enfermería), para dirigir el resto del proceso de obtención de información para establecer un diagnóstico.
En la valoración se realizará una pequeña introducción del caso, la fecha, la hora de la valoración y se detallará la fuente de datos.
En el paciente ostomizado son varios los patrones que pueden verse alterados. En una valoración completa, se deben valorar en profundidad todos ellos. Si queremos centraros -como es el caso- en los problemas de la sexualidad del paciente ostomizado debemos valorar aún con más detalle los patrones funcionales: sexualidad reproducción, pero también autopercepción-autoconcepto, rol-relaciones y adaptación- tolerancia al estrés.
Nivel funcional de codificación:
En este patrón valoramos la satisfacción o insatisfacción con la sexualidad y la reproducción y valora desde los cambios que la persona puede sentir como consecuencia de su estado de salud/enfermedad a nivel de funcionamiento sexual y las preocupaciones que se generan derivadas de este y en referencia a la sexualidad.
También valora otros aspectos como la maternidad o paternidad.
De la información obtenida mediante la anamnesis (datos subjetivos) y la exploración (datos objetivos) en la valoración, la enfermera puede enunciar diagnósticos de enfermería y/o identificar problemas interdisciplinares, posteriormente se seleccionan los NOC (resultados), y las NIC (intervenciones) más adecuadas.
Para identificar y formular el diagnóstico acorde a la situación del paciente hay que conocer las causas que lo producen y las manifestaciones del paciente respecto al problema detectado, conocer cómo vive esta situación, sus miedos, dudas, y preocupaciones para poder abordar estos problemas.
Según la taxonomía diagnóstica NANDA encontramos los siguientes diagnósticos referentes a la sexualidad del paciente ostomizado:
(00059). Disfunción sexual (36):
Definición: Estado en que la persona experimenta un cambio en la función sexual durante las fases de respuesta sexual de deseo, excitación y/u orgasmo que se contempla como insatisfactorio, no gratificante o inadecuado
Dominio 8. Sexualidad
Clase 2. Función sexual.
Factores relacionados. Alteración biopsicosocial de la sexualidad; alteración de la estructura corporal y/o de la función corporal (causada por fármacos, cirugía, procesos patológicos, traumatismo, radiación,...); conflicto de valores; conocimientos deficientes y/o información errónea; falta de modelos del rol o modelos de rol ineficaces.
Características definitorias. Alteraciones en el logro de satisfacción sexual o del rol sexual percibido; búsqueda de confirmación de ser deseable; cambio de interés en los demás o en sí mismo; incapacidad para lograr la satisfacción deseada; limitaciones reales impuestas por la enfermedad y por la terapia; percepción de alteraciones en la excitación sexual, de deficiencia en el deseo sexual, de limitaciones impuestas por la enfermedad y/ por la terapia; verbalización del problema.
NOC: Según la taxonomía NOC para el diagnóstico de Disfunción sexual el resultado elegido es (37) :
>(0119). Funcionamiento sexual.
Definición. Integración de los aspectos físicos, socioemocionales e intelectuales de la manifestación y función sexual.
Dominio. Salud funcional (I)
Clase. Crecimiento y desarrollo (B)
Escala. Se valorarán los indicadores desde” Nunca demostrado” (1) hasta “Siempre demostrado” (5)
En pacientes ostomizados podemos valorar otros resultados en función de las características definitorias o factores relacionados de nuestro caso:
>(1205). Autoestima.
>(1200). Imagen corporal.
>(1501). Ejecución del rol.
NIC. La intervención principal acorde al diagnóstico de enfermería y al resultado escogido es (38):
>(5248). Asesoramiento sexual. Utilización de un proceso de ayuda interactivo que se centre en la necesidad de realizar ajustes de la práctica sexual o para potenciar la resolución de un suceso/trastorno sexual.
La enfermera:
Otras intervenciones que nos pueden resultar útiles en el diagnóstico elegido son:
>(4360)Modificación de la conducta.
>(5230) Aumentar el afrontamiento
>(5622)Enseñanza: sexo seguro.
>(5624)Enseñanza: sexo seguro
>(6610) Identificación de riesgos.
(00065). Patrón sexual ineficaz.(36)
Definición. Expresiones de preocupación respecto a la propia sexualidad.
Dominio 8: Sexualidad.
Clase 2. Función sexual.
Factores relacionados. Conocimientos deficientes sobre las respuestas alternativas a transiciones relacionadas con la salud, alteración de la estructura o función corporal, enfermedad o tratamiento médico; deterioro de la relación con la persona significativa; falta de modelo de rol; modelo de rol ineficaz
Características definitorias. Alteración en la relación con la persona significativa; alteraciones en el logro sexual percibido; expresa cambios en actividad sexual; expresa cambios en las conductas sexuales; expresa dificultades en las actividades y/o conductas sexuales; expresa limitaciones en las conductas sexuales.
NOC. Según la taxonomía NOC para el diagnóstico de Patrón sexual ineficaz el resultado es (37):
>(1205). Autoestima
Definición. Juicio personal sobre la capacidad de uno mismo.
Dominio. Salud psicosocial (III)
Clase. Bienestar psicológico (M).
Escala. Se valorarán los indicadores desde” Nunca positivo” (1) hasta “Siempre positivo” (5)
Podemos elegir otros resultados a valorar en función de las características definitorias o factores relacionados de nuestro caso:
>(1207). Identidad sexual.
>(1200). Imagen corporal.
>(1501). Ejecución del rol.
NIC. La intervención principal acorde al diagnóstico de enfermería y al resultado escogido es (38):
>(5248). Asesoramiento sexual. Utilización de un proceso de ayuda interactivo que se centre en la necesidad de realizar ajustes de la práctica sexual o para potenciar la resolución de un suceso/trastorno sexual.
La enfermera:
Otras intervenciones que nos pueden resultar útiles en el diagnóstico elegido son (39):
>(5220) Potenciación de la imagen corporal.
>(5230) Aumentar el afrontamiento.
>(5270) Apoyo emocional.
>(5370) Potenciación de roles.
>(5400) Potenciación de la autoestima
>(5622) Enseñanza: sexo seguro.
>(6784) Planificación familiar: anticoncepción.
La enfermería es una profesión en constante cambio, esto implica que no debemos dejar de formarnos nunca. Cuando nos referimos al tema de las ostomías desde siempre nos hemos centrado en el aspecto físico y biologicista sin prestar atención al componente psicoemocional. Hay que entender que la persona forma parte de uno todo y que en este caso la parte emocional adquiere una relevancia fundamental.
Dentro de todos los aspectos que incluye una ostomía, uno que preocupa en gran medida a los pacientes ostomizados es la sexualidad, bien porque no se ven capaces de afrontar la nueva situación que supone una ostomía en lo que respecta a su físico o la parte psicológica que el proceso conlleva o bien porque no hay nadie formado que les proporcione la información que necesitan.
Mediante la elaboración de este trabajo he comprendido lo eficaz que sería el abordaje de la sexualidad cuando el personal está formado. Dentro del personal encargado de abordar la sexualidad de los pacientes ostomizados, los enfermeros debemos ser los encargados de proporcionar el soporte a las personas ostomizadas informándoles, resolviendo sus dudas y abriendo el sinfín de posibilidades que existen para vivir una vida sexual plena teniendo en cuenta la ostomía pero no viendo una limitación en ella.
Por ello es necesario continuar investigando para así superar los obstáculos a los que nos enfrentamos como profesionales para de esta manera poder establecer protocolos actualizados que nos brinden la oportunidad de ofrecer al paciente cuidados de calidad y según la evidencia científica respecto a la sexualidad en el paciente ostomizado que favorecerán la adaptación temprana al estoma.
Anexo 1. Tipos de ostomías.
Anexo 2. Consistencia de las heces según el nivel de la ostomía en el intestino. Fuente: Curso de experto en atención global a personas con heridas complejas. Módulo II. Ostomías. Universidad de Castilla- La Mancha. Cuenca. 2018.
Anexo 3. Derechos sexuales de la persona. Fuente: XIII Congreso Mundial de Sexología. Valencia. 1997
Anexo 4. Principales problemas sexuales en el paciente ostomizado. Fuente: Elaboración propia. 2020.
Anexo 5. Alimentos que aumentan la producción de gases. Fuente: Elaboración propia. 2020.