Nazaret Vico Moya
Enfermera graduada por la Universidad de Salamanca.
La obesidad se ha convertido en unas de las principales enfermedades del siglo XXI.
Los factores que causan la obesidad son múltiples, se puede decir que son debidos a factores socioculturales, conductuales, a la demografía, biológicos y a la no realización de actividad física. Este trabajo se centra en un tratamiento para la obesidad como es el balón gástrico. Se ha elegido el estudio de este tratamiento debido a que en la última encuesta de salud realizada en España, ha habido un aumento significativo de personas con obesidad mórbida.
El objetivo general ha sido buscar y analizar la información sobre la técnica del balón gástrico tanto en el panorama nacional como en el internacional. Esta técnica tiene unas características de idoneidad en lo que respecta al tipo de paciente, se aconseja la colocación del balón gástrico a aquellos cuyo IMC sea superior a 30, y a los que tengan un IMC entre 25-30 que por la patología asociada que tengan precisen este tipo de tratamiento.
Está demostrado que se trata de una técnica simple y segura, con numerosas ventajas, pero que al ser una técnica invasiva tiene sus riesgos.
El balón gástrico es un dispositivo de silicona que se introduce en el estómago del paciente. Tiene una capacidad de 400 a 900 cc dependiendo del fabricante, al llenarse toma la forma de un “balón” o “globo” perfectamente redondo. Esto provoca una sensación de saciedad disminución del apetito. Por lo consiguiente provocará en el paciente una pérdida progresiva del peso.2,3.
El balón gástrico como ya se ha mencionado anteriormente está hecho de silicona4 y al llenarlo de solución salina adquiere una forma esférica. Tienen una válvula unidireccional que permite que un catéter colocado en la parte externa se pueda remover después de que se cierre dicha válvula, lo que hace que el balón pueda flotar en el estómago.5,6
Hay un modelo de balón que lleva un catéter de colocación, es decir una guía metálica en su interior. Esta guía le da rigidez para facilitar su colocación en la cavidad gástrica.6
Inserción del balón gástrico 7,9
Por último, se debe monitorizar al paciente.
Figura 1. Díaz Carla M. Ob:20 Inserción del balón Intragástrico. Revista Gen, 2009.
Extracción del balón gástrico10.
Figura 2:20 Retirada del balón gástrico, Revista Gen, 2009.
En cuanto a los inconvenientes del Balón gástrico se puede decir que todos los procedimientos médicos tienen desventajas y pueden causar efectos secundarios, pero el balón intragástrico tiene menos complicaciones que la cirugía bariátrica más invasiva. Se han registrado efectos secundarios como los siguientes:
En cuanto a las ventajas, el Balón Intragástricose puede comparación someterse a una operación de bypass gástrico o banda gástrica, el procedimiento de balón intragástrico tiene las siguientes ventajas:11,20
PACIENTES NO ADECUADOS AL TRATAMIENTO DEL BALÓN INTRAGÁSTRICO16-19
Cabe mencionar que para este tratamiento no se le puede realizar a todo tipo de pacientes, si no que estos deben tener unas características Los siguientes pacientes no son adecuados y no deben considerar realizarse este procedimiento:
CONCLUSIONES
El balón gástrico es un dispositivo que se usa como tratamiento para la obesidad. Este dispositivo se inserta en la cavidad gástrica del paciente, que tras ser inflado provoca una sensación de saciedad y una disminución del apetito, dando lugar a una pérdida progresiva de peso.
El objetivo de este tratamiento es conseguir una pérdida de peso controlada y mantenida, seguida por los profesionales. El paciente de esta forma debe de cambiar su estilo de vida en primer lugar haciendo modificaciones en las calorías que ingiere en la dieta, en segundo lugar realizando ejercicio físico de forma habitual y por último modificando los hábitos de vida poco saludables.
Este tratamiento no está indicado en todo tipo de pacientes. La idoneidad de colocar un balón intragástrico debe ser valorada por un equipo de especialistas que analizarán sus posibles ventajas e inconvenientes. Se suele aconsejar su colocación sólo en aquellos casos de obesidad en los que el IMC es superior a 30. Los pacientes que más se benefician de este tipo de tratamiento son aquellos que tienen un gran sobrepeso (peso > 40% o > 20-25 kg respecto a su peso ideal). Se contraindica la colocación del balón en personas con intervenciones quirúrgicas previas en el estómago, lesiones gástricas importantes, embarazo, o con dificultades para aceptar el tratamiento y seguimiento.
Las ventajas de este tratamiento es que consiste en una técnica simple y segura, de las menos invasivas que existen a día de hoy. El procedimiento es menos costoso, además de que el paciente, por lo general no permanece ingresado en el hospital. También da lugar a mejoras satisfactorias en la hipertensión arterial, diabetes, problemas respiratorios y la osteoartritis. Aunque sea una técnica segura como toda intervención tiene sus riesgos. Puede ocurrir que el balón se desinfle por un pinchazo y pase al intestino delgado y provoque una obstrucción del mismo. La aparición de laceraciones, úlceras, hemorragias o perforaciones es posible.
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