Desde hace meses nos vienen solicitando un número sobre lesiones tendinosas y ligamentosas y con Septiembre ve la luz esta petición lectora con una serie de artículos con una perspectiva práctica y dirigida a la clínica fisioterapéutica fundamentalmente.
El primer trabajo lleva por título Tendinopatía: una visión actual, nos presenta esta estructura tan importante del aparato musculoesquelético humano. Define desde diferentes visiones qué es un tendón, explicándonos su arquitectura desde el punto de vista microscópico y su composición para llevarnos hasta los diferentes tipos de tendón a nivel macroscópico que podemos localizar en el cuerpo humano. A continuación, nos expone la lesión del tendón: Su epidemiología de tres de los principales tendones (como son los que componen el manguito de los rotadores, tendón rotuliano y tendón aquíleo), etiología y factores de riesgo intrínsecos y extrínsecos, los diferentes modelos patoetiológicos que existen en la actualidad profundizando en el modelo de contínuum (desarrollado por Cook y Purdam), el debate acerca del papel de la inflamación en la lesión tendinosa. Por último, acaba describiendo los tratamientos más utilizados: Desde programas de cinesiterapia activa descritos por investigadores punteros en este campo como Cook hasta el uso de termoterapia, electroterapia, terapia manual, así como tratamientos de fisioterapia avanzada y exponiendo el papel menos conocido acerca de cómo la nutrición y el uso de suplementos puede intervenir en la prevención y recuperación de las lesiones del tendón.
Tendinopatía de miembro inferior: principios fundamentales y actuación clínica fisioterápica es el segundo de los trabajos. El trabajo recoge los apartados de anatomía y estructura tendinosa, fisiopatología y carga de trabajo, así como importancia del dolor en la tendinopatía de extremidad inferior. Por otra parte, se tratan aspectos tales como el examen objetivo y subjetivo en fisioterapia, la aplicación de ejercicio terapéutico y el manejo terapéutico en los principales cuadros clínicos de tendinopatía de miembro inferior: isquiotibial proximal, patelar, aquílea y de glúteo medio.
No menos interesante es el siguiente, Tratamiento fisioterapéutico en la tendinopatía del supraespinoso. Las alteraciones músculo-esqueléticas del hombro se desarrollan y se hacen más complejas con el paso del tiempo hasta la aparición de dolor en la articulación. Existen datos de que una de cada tres personas experimentan dolor en el hombro en alguna etapa de sus vidas e incluso aproximadamente la mitad de la población sufren al menos un episodio anualmente, además la incidencia es de 30-50% de todas las lesiones deportivas, según diversos autores. El dolor de hombro ocupa el segundo lugar tras la lumbalgia, y afecta aproximadamente al 16-21% de la población. La causa más frecuente es el síndrome de impingement subacromial, estimándose un 44-60% de las consultas médicas por dicho dolor. En España se han descrito cifras de prevalencia de 78 casos por 1.000 habitantes, lo que conlleva un importante consumo de recursos asistenciales y pérdidas productivas por ausentismo laboral. La mayoría de personas afectadas son menores de 60 años. Su sintomatología suele estar relacionada con el trabajo desempeñado o la actividad deportiva realizada, sobre todo en aquellos que requieren el uso de la mano por encima de la cabeza. La tendinopatía del manguito de los rotadores es la causa más frecuente de dolor disfunción a nivel del miembro superior y aumenta su aparición con la edad. La mayoría de la población que sufre estas molestias en el hombro se debe al conjunto de músculos denominado el manguito rotador y a los tejidos circundantes. El tratamiento incluye métodos quirúrgicos y no quirúrgicos. Los objetivos del tratamiento no quirúrgico serán: reducir el dolor y la inflamación subacromial, tratar el manguito rotador comprometido y restaurar la función del hombro.
Finalizamos con un clásico: Rotura del ligamento cruzado anterior ¿qué se puede hacer desde el deporte? Prevención y recuperación. La rotura del ligamento cruzado anterior es una lesión relativamente habitual entre los practicantes de deportes que impliquen movimientos de cortes, cambios de dirección o pivotes (baloncesto, futbol, hockey, etc.), y tiene una especial incidencia en las mujeres. Atendiendo a la edad, las personas entre 15 y 40 años serán especialmente sensibles a sufrir este tipo de patología. En valores absolutos, en EE. UU. se realizan entre 250.000 y 350.000 roturas de ligamento cruzado anterior (RLCA) cada año. Dentro de estas, las jugadoras de baloncesto y fútbol tienen entre 2.4 y 4.1 veces más riesgo de sufrir esta lesión que sus homólogos varones (datos extraídos a nivel universitario). Además, cabe señalar que en los últimos años este tipo de lesiones han aumentado de manera exponencial debido a la generalización de la práctica de deportes de equipo. Visto el impacto que tienen este tipo de lesiones sobre los deportistas resulta necesario preguntarnos qué debemos hacer cuando estas aparecen. Al respecto, el 98% de los traumatólogos y cirujanos ortopédicos recomiendan la ReLCA para pacientes que desean volver a practicar deporte.
Una vez más, deseamos que disfruten del contenido que ponemos a vuestra disposición y que este sea de interés profesional para la práctica diaria basada en la evidencia científica.