Hoy en día son muchas las personas sometidas a intervenciones quirúrgicas con el objetivo de implantarles una ostomía para solucionar un problema de salud. Es por ello que los profesionales sanitarios deben tener una formación especializada en este ámbito con el fin de apoyarles en el proceso consiguiendo así una mejor adaptación al cambio que sufren tanto en el aspecto físico como psicológico y social. En esta revisión se busca conocer los diferentes tipos de ostomías que hay y las complicaciones que pueden conllevar, así como los cambios en la calidad de vida de los pacientes y las intervenciones que los profesionales de enfermería pueden llevar a cabo para facilitar este proceso y mejorar la autoestima de los pacientes.
Objetivos: El principal objetivo es conocer la calidad de vida en pacientes ostomizados.
Metodología: Revisión bibliográfica realizada mediante la consulta de 2 bases de datos obteniéndose un total de 22 artículos.
Resultados: Se obtienen una serie de artículos que muestran las diferentes ostomías existentes, las complicaciones que pueden generar, como afecta a la calidad de vida de los pacientes y las intervenciones de enfermería a realizar.
Conclusión: Dada la incidencia de pacientes con ostomías, es importante que los profesionales de enfermería cuenten con la formación adecuada para poder ejercer un seguimiento adecuado a esta población incrementando así su calidad de vida.
Palabras clave: Ostomía, calidad de vida, cuidados de enfermería
Nowadays, there are many people who are subjected to surgical interventions in order to implant an ostomy to solve a health problem. That is the reason why health professionals should be specialized in this area in order to support them in the process, thus achieving a better adaptation to the change that they suffer both in the physical, psychological and social aspects. This review seeks to know the different types of ostomies that exist and the complications that they can entail, as well as the changes in the quality of life of patients and the interventions that nursing professionals can carry out to facilitate this process and improve the self-esteem of patients.
Objectives: The main objetive is to know the quality of life in patients with ostomies.
Methodology: Bibliographic review carried out by consulting 2 databases, obtaining a total of 22 articles.
Results: A series of articles are obtained that show the different existing ostomies, the complications they can generate, how they affect the quality of life of patients and the nursing interventions to be carried out.
Conclusion: Given the incidence of patients with ostomies, it is important that nursing professionals have adequate training to be able to carry out adequate monitoring of this population, thus increasing their quality of life.
Keywords: Ostomy, quality of life, nursing care
En 1948, la OMS elaboró una definición de la CVRS describiéndola como “un estado de completo bienestar físico, emocional y social, y no solo la ausencia de enfermedad”. En 1994, se definiría la calidad de vida como “la percepción de un individuo de su posición en la vida en el contexto de la cultura y sistema de valores en los que vive y en relación con sus objetivos, expectativas, estándares y preocupaciones” (1). Podemos definir la salud de una persona basándonos en 5 puntos: Características hereditarias y genéticas , bioquímicas, fisiológicas o anatómicas, estado mental y la salud individual (2).
Existen diferentes instrumentos que permiten medir la CVRS de los pacientes, el objetivo de esto es obtener una evaluación más veraz y válida de la salud de la sociedad con el fin de determinar los riesgos y beneficios del sistema sanitario de un área determinada. Estas herramientas tienen que cumplir una serie de características, entre las que se encuentran la validez, fiabilidad y sensibilidad a los cambios, además de la sencillez, facilidad de cumplimentación e interpretación y la capacidad para suministrar datos de provecho clínico. La mayoría de estos instrumentos son cuestionarios que constan de una serie de instrucciones para la realización del mismo, un conjunto de ítems agrupados en grupos que miden diferentes aspectos de la salud (aspecto físico, mental y social) y una serie de opciones a modo de respuestas con estilo dicotómico o siguiendo el modelo de la escala Likert. Son ejemplos de cuestionarios empleados en la medición de la calidad de vida: SF-36 , SF-12, el Perfil de Consecuencias de la Enfermedad o EQ 5D (2,3).
Alonso y Cols J. Versión española del cuestionario de Salud SF-12. 2015
Entendemos por ostomía una abertura realizada quirúrgicamente en la piel de un paciente en los casos en que, por razón de una enfermedad o accidente, no es posible que una determinada parte del cuerpo funcione correctamente. Pueden utilizarse para la nutrición, drenaje o eliminación y según el órgano implicado serán intestinales, urinarias o traqueal. La apertura al exterior que se crea recibe el nombre de estoma (4).
Podemos encontrar diferentes tipos de ostomías en función de su situación anatómica:
American Cancer Society. Tipos de colostomías y sistemas de bolsa recolectora. 2019
American Cancer Society. Tipos de colostomías y sistemas de bolsa recolectora. 2019
Pereira Cunill JL, García Luna PP. Gastrostomía endoscópica percutánea. Revista Española de Enfermedades Digestivas. 2010;102(10):609-609.
P Enrica Ramirez. Gastrostomías y yeyunostomías. Técnica quirúrgica. 2015
Guía práctica de autocuidados. Hospital universitario Ramon y Cajal: Salud Madrid; 2005
Gómez Ayala AE. El paciente ostomizado. 2006; 20 (8): 50-55
Sonda de nefrostomía | Boston Scientific [Internet]. www.bostonscientific.com.
Cancer Care Wetern New York. 2020.
Una vez que el paciente sea dado de alta a su domicilio, comenzará una nueva etapa en su vida marcada principalmente por el cambio en su imagen corporal. Es importante, por lo tanto, que será conocedor de las cualidades y cuidados que debe tener la ostomía, para que afecten en la menor medida posible a su calidad de vida.
Uno de los principales cuidados que deben llevarse a cabo en el caso de las intervenciones quirúrgicas en las que se practica una colostomía, ileostomía o urostomía, es la atención a la piel que rodea el estoma. Es recomendable limpiarla con agua (no muy caliente para evitar la irritación) y jabón desde dentro hacia fuera, y mantenerla seca para poder colocar la bolsa. Es posible que en la piel que rodea el estoma crezca vello, en estos casos será preferible cortarlo en lugar de rasurarlo. Existen diversos tipos de dispositivos entre los que encontramos las bolsas cerradas, estas no pueden vaciarse por lo que deberán cambiarse por otra cada vez que se necesite, y las bolsas abiertas que no necesitan ser desechadas cada vez que se necesiten cambiar ya que pueden vaciarse por su extremo inferior, ambas pueden tener filtros para la salida de los gases evitando así el mal olor. Asimismo, estas bolsas pueden ser de una pieza (el adhesivo y la bolsa colectora son un mismo dispositivo, por lo que al cambiarlo se debe tirar todo) o de dos o tres piezas (en estos casos la placa adhesiva es independiente de la bolsa por lo que no hay que cambiarlo en casa uso, esto es beneficioso para la piel periestomal). Los discos adhesivos pueden ser lisos o convexos (estos son útiles cuando el estoma se encuentra muy hundido). Las bolsas, además, podrán ser opacas o transparentes en función de su uso, se recomienda que sean opacas para las heces y transparentes en las urostomías. La elección de la bolsa colectora dependerá de las características de la ostomía, en el caso de las ileostomías, las heces son más líquidas y abundantes, por lo que se recomienda bolsas abiertas y de 2 piezas, en las colostomías, las heces son sólidas y con cantidad normal por lo que es favorable 1 bolsa cerrada y de una pieza. En el postoperatorio inmediato se aconseja el uso de bolsa de urostomías, ya que no tienen filtro, y permiten comprobar si el sistema digestivo funciona adecuadamente ya que al carecer del sistema de filtrado no permite la salida de gases. Para favorecer la calidad de vida del paciente, existen diferentes complementos que facilitan su uso: Pastas moldeables para adaptar la bolsa en pacientes con pieles irritadas o estomas complejos, filtros y desodorantes para reducir los olores, sistemas de irrigación para favorecer el lavado intestinal, etc. Una vez seleccionado el dispositivo que se va a emplear, se medirá el diámetro del estoma con el fin de ajustar la bolsa lo máximo posible a él (13,14).
Las dietas más recomendadas son aquellas ricas en frutas y zumos ricos en vitamina C ya que acidifican la orina, lo que reduce el riesgo de infección y mal olor. Tras la intervención, se busca una dieta que mantenga la consistencia de las heces, es decir evitando diarreas que además de aumentar la pérdida de líquidos y electrolitos, implican un mayor número de cambios de las bolsas colectoras. Esta desaconsejado el café y las bebidas con gas, es favorable repartir las comidas en varias tomas de menor cantidad evitando fritos, grasas y rebozados, así como alimentos muy fríos o calientes. Se recomienda masticar bien los alimentos para evitar obstrucciones del estoma y beber al menos medio litro de agua al día. Hay una serie de alimentos que incrementan una consistencia más sólida a las heces como son el arroz, la pasta, queso tierno, plátano o la patata, además de otros que reducen el olor como el perejil, manzanilla y el yogur. Si padece un cuadro de diarrea se deberá tomar suplementos de fibra soluble, evitar las verduras, leche y yogures y aumentar la ingesta de arroz hervido, en algunos casos será necesario administrar fármacos como la Loperamida (7).
Riobó P, Sánchez Vilar O, Burgos R, Sanz A. Manejo de la colectomía. 2007
En cuanto a las actividades que se pueden realizar portando una bolsa colectora de colostomía, no hay impedimentos. Los pacientes con este tipo de dispositivos podrán practicar deportes de agua como la natación tanto en playas como en piscinas, siendo recomendable hacerlo con la bolsa puesta y comprobando previamente si hay que vaciarla, se aconseja también colocar cinta adhesiva impermeable en torno a la bolsa. En el caso de mujeres es favorable el uso de bañadores con falda integrada y en los hombres trajes de baño anchos o camisetas deportivas que cubran la bolsa. Por otra parte, se deberán evitar deportes de contacto que pudieran dañar el estoma (14).
Otro tema preocupante para los portadores de ostomías son los viajes, es totalmente posible viajar, para ellos se debe planificar los suministros de bolsas y accesorios duplicando los que emplearía en su domicilio y localizando posibles establecimientos donde comprar recambios. Para los desplazamientos en coche se puede utilizar con normalidad el cinturón de seguridad, para viajar en avión se recomienda llevar en el equipaje de mano algún recambio y si se viaja al extranjero, solicitar documentación médica que indica la necesidad de llevar consigo los dispositivos. Es frecuente la diarrea del viajero, ya que al estar fuera de casa se altera la dieta, también se puede deber a los cambios de agua o al clima, es beneficioso no comer frutas ni verduras con la cáscara y sin lavar, hielo de agua local y beber agua embotellada.(14,20).
En mujeres, ser portadoras de una colostomía, urostomía o ileostomía no supone un impedimento para quedarse embarazadas. Se recomienza esperar al menos dos años desde la intervención quirúrgica para que cicatrice completamente. Es probable que durante el embarazo, el estoma, cambie de diámetro, se retraiga o prolapse y cambie de ubicación debido a que el crecimiento del feto irá desplazando los órganos abdominales, que tras el parto volverán a su estado habitual. Será necesario por lo tanto emplear dispositivos y accesorios diferentes a lo largo de los trimestres. En el caso de pacientes con ileostomía, se requiere un mayor control ya que el útero aumenta y puede llegar a presionar y obstruir la zona provocando dolor tipo cólico y disminución del ritmo de evacuación. Las pruebas a realizar serán las mismas que en un embarazo sin ostomía, y tampoco es impedimento un parto vaginal, a excepción de los casos en los que la mujer tiene fistulas anales activas que pueden suponer una complicación, por lo que se recomienda cesárea para evitar daños en el suelo pélvico (21).
La vida sexual e intimidad con la pareja es un tema que se debe recuperar tras la cirugía de ostomías. En el caso de personas solteras, el riesgo de una autoestima más baja a la hora de exponerse ante gente nueva es mayor. Con las ostomías, es recomendable vaciar la bolsa colectora previamente. Las mujeres podría sentir dolor durante las relaciones sexuales, mientras que en el hombre es posible que la potencia sexual se vea afectada durante un corto plazo con dificultad para obtener y mantener una erección (22).
En el caso de las traqueostomías, una vez realizada la intervención, el paciente permanecerá unos días en el hospital, durante este periodo se le informará de todos los aspectos necesarios. Entre estos cuidados se encuentra la limpieza y cambio de traqueostomía con el fin de reducir los riesgos e infecciones. Generalmente las cánulas están formadas por tres piezas: Cánula externa, cánula interna y fiador (que se emplea sobre todo en las primeras ocasiones o en casos en los que es dificultosa la colocación), además se sujetará con un lazo o cinta al cuello para evitar su salida accidental. Es recomendable realizar el primer cambio de cánula en torno a los primeros 7-14 días desde su inserción, luego los cambios se realizarán en función a las características y necesidades del paciente. Lo más importante, una vez dados de alta a su domicilio, es mantener una higiene adecuada, los primeros días se recomienda lavarla con un antiséptico y mantener la zona seca, además de evitar la adherencia de secreciones que puedan favorecer las obstrucciones, para ellos se extraerá la cánula interna. El habla es otro de los puntos a tratar después de la intervención, generalmente los pacientes carecen de la posibilidad de hablar, pero en función del tipo de cánulas empleadas, podría garantizarse la fonación. En el caso de las cánulas fenestradas, no se elimina el paso de aire a través de la laringe por lo que el paciente podrá hablar (18,23).
El tema de la alimentación, es algo complejo ya que se producen cambios en la estructura y anatomía de las vías respiratorias tanto por la propia afección como por no haber comido durante un largo tiempo, debilitando la musculatura. Al principio es posible que requieran de nutrición parenteral (vía intravenosa) o enteral (mediante sonda nasogástrica) hasta recuperar la fuerza muscular para poder tragar. El paciente deberá incrementar la ingesta de líquidos durante la comida ya que evitan el espesamiento y la formación de mucosidad, también se recomienda mantener una posición recta y masticar bien los alimentos para evitar atragantamientos. El paciente deberá tomar pequeños bocados para reducir el riesgo de atragantamiento. Existe la posibilidad de que se pierda la capacidad de saborear. En los casos en que la cánula tenga un manguito, deberá desinflarse durante la deglución para facilitar el proceso. (23).
En cuanto a las actividades físicas que se podrán realizar siendo portador de una traqueostomía, son más limitadas ya que afecta a la vía respiratoria, por lo que se debe tomar especial precaución en aquellos ejercicios que implican agua (20).
La vida sexual en estos casos se puede retomar, recomendando la eliminación de las secreción antes del contacto y teniendo en cuenta que es posible que aumenten durante el acto (22).
Para los pacientes portadores de bolsa de colostomía, ileostomía o urostomía, esto supone un cambio en su calidad de vida, sin contar con el coste económico que implica para el sistema sanitario. Estos pacientes deben lidiar con la pérdida del control de sus esfínteres lo que afecta también a su vida social. Es diferente la aceptación de un paciente que lleva años lidiando con una enfermedad intestinal cuyo pronóstico final sería la intervención quirúrgica, que la de un paciente que debe ser intervenido de urgencia.
Las ostomías pueden causar complicaciones a partir de la construcción del estoma y surgir en cualquier momento, por lo que es importante reconocerlas para identificarlas lo antes posible con el fin de actuar. Las complicaciones más comunes son:
En general, cualquier cambio en el color, tamaño, piel periestomal o líquido drenado, debe ser comunicado (24,25).
Otros problemas por los que los pacientes portadores de una traqueostomía deberán contactar o acudir a su centro sanitario son la irritación, enrojecimiento o hinchazón de la piel que rodea la cánula, los cambios de color, olor o viscosidad de la mucosidad.
También si tiene fiebre mayor de 38º, un tapón de mucosa que es incapaz de expulsar o si presenta sangrado, dificultad respiratoria, cianosis en los labios, hinchazón en el cuello o es incapaz de introducir la cánula tras el cambio (26).
En el aspecto psicológico, también hay un gran impacto ya que el paciente debe enfrentarse a una nueva imagen corporal que es posible que intervenga en sus relaciones interpersonales y en la expresión de su sexualidad. Dentro de los trastornos sexuales que los pacientes ostomizados pueden presentar se encuentra la abstinencia sexual, impotencia y frigidez. Además de las complicaciones propiamente dichas de la ostomía y del estoma, surgen otro tipo de problemas relacionados con el terreno económico y laboral (13).
En España hay en torno a 70000 personas ostomizadas y cada año se incrementan en torno a 16000 nuevos casos, siendo el 60% de las ostomías temporales y un 40% de ellas permanentes. Según un estudio realizado en hospitales españoles (tanto públicos como privados), 1 de cada 4 pacientes ostomizados es dado de alta sin saber como manejar correctamente su ostomía (higiene, complicaciones, alimentación…). Se estima que en torno a un 35% de estos 70000 pacientes, no tienen acceso a cuidados por parte de profesionales de enfermería especializados (27).
Estas cifras, son un claro ejemplo de la necesidad de mejorar los cursos de postgrado proporcionados por las distintas Universidades de nuestro país. Ya que una mejor formación para los profesionales de enfermería suponen un beneficio, tanto para los pacientes como para los propios profesionales, que contarán con mayores conocimientos y seguridad a la hora de realizar el proceso.
En base a los datos anteriores, se ha decidido seleccionar este tema para la realización de una revisión bibliográfica con el fin de conocer la calidad de vida que tiene los pacientes con ostomías, así como las complicaciones que surgen derivadas de la implantación de un estoma y como afectan a la esfera física, psicológica, social y laboral.
Como enfermera, considero que somos los profesionales más implicados en el cuidado, manejo y educación de este tipo de pacientes, ya que participamos en su seguimiento desde el periodo preoperatorio, durante el ingreso hospitalario y la evaluación posterior para la detección de complicaciones y resolución de dudas a cerca de su situación. Para poder efectuar una correcta educación y seguimiento, es necesario que los profesionales de enfermería cuenten con una correcta formación especializada en este ámbito. Para ello, debe conocer las diversas clases de ostomías que existen y las características de cada una de ellas con el fin de ser capaces de recomendar a los pacientes los dispositivos de recolección más adecuados para evitar complicaciones. Además, es importante que los profesionales de enfermería realicen un seguimiento exhaustivo de los pacientes con el objetivo de conocer sus puntos débiles y detectar precozmente las posibles complicaciones que puedan surgir, llegando así a instaurar un tratamiento lo antes posible. Así mismo, es fundamental que la familia y personas más cercanas al paciente tengan la información suficiente sobre las ostomías y el uso de las mismas para facilitar la situación del usuario y que este se sienta más comprendido en su entorno. Por otro lado, es importante también que la información y educación a cerca de las ostomías, se extiende a toda la población, esto permitiría normalizar esta situación y supondría un aumento de confianza en el momento de reincorporarse a la vida laboral y a la realización de actividades de ocio. También es de interés, recalcar la presencia de organizaciones y asociaciones que pretenden dar visibilidad a los pacientes ostomizados normalizando su situación y buscando mejorar su calidad de vida y accesibilidad a los servicios público, como es el caso de ASOE (www.asoeasociacion.org ).
Objetivo principal: Conocer la calidad de vida de los pacientes con ostomías.
Objetivos secundarios:
Para la elaboración de este trabajo se ha realizado una revisión bibliográfica sobre la calidad de vida en pacientes con ostomías.
La búsqueda de artículos se llevó a cabo durante el período comprendido entre abril y junio 2020. Las bases de datos consultadas fueron Pubmed y Scielo. La búsqueda se efectuó combinando los descriptores "Quality of life”, “Ostomy”, “Nursing care” y sus correspondientes traducciones al español “Calidad de vida”, “Ostomía”, “Cuidados de enfermería” recogidos de la plataforma DeCS y utilizando los operadores booleanos “AND”, “OR” y “NOT”.
Por su parte, para la introducción se han incluidos artículos obtenidos de diferentes paginas web de Universidades (Universidad de Jaén, Northumbria University) y de Hospitales (Hospital Universitario Ramón y Cajal), además de datos procedentes de la consulta de organismos oficiales (OMS, American Cancer Society…)
Se han seleccionado únicamente artículos escritos en inglés y español comprendidos entre 2014 y 2020, para facilitar la búsqueda y lectura de artículos, solo se han empleado aquellos de acceso gratuito. Solo se han empleado aquellos artículos que enfocaran el tema desde un punto de vista sanitario.
Se han rechazado los artículos que incumplieran los criterios de inclusión anteriormente mencionados. También se han excluido aquellos que centraran el tema exclusivamente en niños o ancianos.
Para la realización de esta revisión se consultaron un total de 2 bases de datos, una vez aplicados los criterios de inclusión y exclusión y tras la eliminación de artículos duplicados y lectura crítica de los mismos, se han obtenido 21 artículos con los que se ha realizado esta revisión.
El cáncer afecta a la sociedad tanto en su magnitud epidemiológica, como social y económica. Se estima que los nuevos casos de cáncer aumentaran en los países en desarrollo y aún más en los países desarrollados. Según el Instituto Nacional del Cáncer (INCA), las neoplasias que afectan al colon y/o al recto se sitúan en las principales patologías del sistema gastrointestinal. Para el tratamiento en estos casos, se lleva a cabo la resección quirúrgica, asociada o no a quimioterapia. Se extrae el tumor de la zona afectada, extirpando la porción de órgano afectada, construyendo un orificio denominado estoma, para la eliminación de sustancias al exterior (28).
El cáncer colorrectal es uno de los tumores malignos más comunes dentro de las neoplasias del tracto gastrointestinal (29).
La implantación de ostomías intestinales son un tipo de intervenciones quirúrgicas que se emplean para tratar afecciones tanto benignas como malignas como pueden ser neoplasias, traumatismos o enfermedad inflamatoria intestinal. La OMS define la calidad de vida como una percepción individual de su posición en la vida en el contexto de la cultura y los sistemas de valores en los que viven y relacionado con sus metas, expectativas, estándares y preocupaciones (30). Este tipo de intervenciones suponen un gran impacto en la calidad de vida del portador afectando a la esfera física, psicológica y social, además de intervenir en las actividades físicas, modificando la dieta y suponiendo un impedimento para la sexualidad de las personas ya que implica cambios en la apariencia física y en las relaciones sociales. Las personas que se someten a este tipo de intervenciones deberán hacer frente a su nuevo funcionamiento fisiológico, teniendo en cuenta que su cuerpo hasta ese momento su cuerpo funcionaba de forma automática y tras la operación convivirán con una incontinencia asociada a la formación del estoma (31,32). La técnica de nefrostomía percutánea consiste en la implantación de una sonda que comunica de forma directa el riñón con el exterior a través de la piel para la excreción de la orina. En la mayoría de casos, el paciente presenta una obstrucción que dificulta o impide el paso de la orina por la vía urinaria hasta la zona inferior, pero también se puede utilizar en eventos como fístulas urinarias. Mediante esta técnica se evita el riesgo de acumulación de orina y por tanto de hidronefrosis y afectación renal. Se trata de la técnica de elección en estos casos por el bajo porcentaje de complicaciones (15). La técnica de colocación de un estoma para la eliminación intestinal consiste en la realización de una incisión quirúrgica en el abdomen con el fin de sacar al exterior una porción del intestino y desviar, de forma temporal o permanente, las deposiciones en casos como cáncer intestinal o enfermedades inflamatorias intestinales. Las características de las deposiciones se ven influidas por la porción intestinal seccionada, según esto se seleccionará un tipo determinado de equipo colector. Un gran número de pacientes desconocen como asimilar los cambios que sufren tras la intervención para colocar un estoma y necesitan intervenciones educativas para encararlos, además de mejorar la calidad de vida y reducir las complicaciones. Para ello también es importante asegurar una correcta atención continuada para el paciente. La atención antes de la intervención puede ayudar a predecir la capacidad que tendrá el paciente para el manejo y autocuidado de la ostomía (33).
En torno a 1 millón de personas conviven con ostomías, y cada año se intervienen entre 100000 y 13000 nuevos casos. Según el tipo de ostomía, se ha identificado que el mayor numero de complicaciones reside en las ileostomías, siendo más predominante los trastornos cutáneos periestomales. Esto afecta también a la calidad de vida del portador ya que en muchos casos, las afecciones de la piel se producen por fugas, lo que se traduce en dermatitis que implica una disminución de la autoestima de los pacientes (34). Se Calcula que existen alrededor de 70.000 personas ostomizadas en España, en torno a 15 de cada 1000 españoles serán portadores de algún tipo de ostomía intestinal o urológica (dejando fuera a otros tipos de ostomías como las traqueostomías) (35). El avance de la ciencia y la medicina ha permitido poder tratar enfermedades que antes eran motivo de elevada mortalidad, como resultado de esto aparecen las intervenciones para tratar problemas del tracto digestivo mediante la realización de un estoma, lo que implica pérdida de control sobre los esfínteres afectando a la vida, autoestima, autoaceptación y a la imagen corporal. Todo este conjunto de situaciones hará que los pacientes tengan que reajustar su vida y sus prioridades, aun así cada uno actuará de forma diferente, aquellos que acepten con normalidad su enfermedad y el proceso que esta conlleva tendrán más opciones de recuperación al reducir las emociones negativas. Por ello, desde el enfoque psicológico, la aceptación de la enfermedad es un aspecto fundamental y efectivo a modo de terapia para superarla y convivir con ella (36).
Las ostomías cambian radicalmente la vida de los pacientes teniendo consecuencias físicas, psicológicas y sociales. El cuidado de las ostomías implican actividades y seguimiento pre y post operatorio (37). Dentro de los puntos que más preocupan a la población con ostomías se presenta el momento de dormir, las relaciones sociales y familiares y la sexualidad e imagen corporal (31). Los pacientes portadores de estoma, mayormente experimentan una pérdida de confianza en si mismos que se manifiesta en ansiedad y/o depresión debido a los cambios en la imagen corporal, afectando a su estado general, a la calidad de vida y esfera psicológica. El resultado del tratamiento quirúrgico se ve directamente influido por el estado psicológico del paciente, de la preparación individual y de su entorno social en el preoperatorio, paliar el miedo y ansiedad ante la anestesia, la propia intervención, los cambios en la imagen corporal y en el estilo de vida. A demás de los cambios propiamente dichos resultantes de la operación, los pacientes se enfrentan a alteraciones espirituales, sexuales, sociales y laborales, que en conjunto afectan a la autoestima de los individuos. Está comprobado que cuanto mayor sea la aceptación de la enfermedad mayor será la calidad de vida, esto se incrementa con una correcta atención y seguimiento sanitario así como un nivel de educación adecuado que les permita no renunciar a su vida, trabajo y relaciones sociales adaptándolos a sus nuevas capacidades (29,36,38). En un estudio realizado con pacientes con carcinoma colorrectal e intervenidos quirúrgicamente para la implantación de una colostomía, un grupo de pacientes recibió seguimiento e información por parte del servicio de enfermería, mientras que el otro, además de la enfermería rutinaria, presenció apoyo de intervención durante tres meses, desde una semana del postoperatorio, en el que se les dio apoyo social y psicológico, participación de otras personas con experiencia directa sobre el caso e intervenciones ajustadas a las necesidades de cada paciente. Los resultados obtenidos a raíz de este estudio se traducen en un aumento de las capacidades para el autocuidado y la calidad de vida de los pacientes, al contar con más métodos y habilidades para la gestión de su nueva situación (38). La autoestima de los pacientes viene determinada por su capacidad para aceptar y comportarse ante las diferentes situaciones de la vida. También constituye un indicador de la salud mental ya que afecta a las esferas afectivas, sociales y psicológicas. El tener un estoma, por ello, puede distorsionar la imagen corporal del paciente afectando por lo tanto a la capacidad de verse a sí mismo y a su autoestima. El apoyo por parte de su entorno social, y el respaldo del sistema sanitario, favorecen la capacidad del paciente de aceptarse a sí mismo con su nueva situación vital y corporal (29). Los pacientes con acceso a profesionales de enfermería especialistas en ostomías y capacitadas para atajar las complicaciones que puedan surgir, tienen una mayor oportunidad para lograr una calidad de vida mejor (39).
Según estudios realizados en personas portadores de ostomías, la mayoría de ellos sufrieron complicaciones relacionadas con el estoma. Entre el 21% y el 70% de los pacientes ostomizados llegan a desarrollar alguna complicación, sin embargo dentro de los pacientes ostomizados hay un gran número de ellos que podrán vivir sin sufrirlas (31,40). Para reducir estas complicaciones es necesario un tamaño de bolsa adecuado para proteger la piel que rodea al estoma y evitar el contacto de la orina o de las heces directamente con ella. Para ello, los profesionales de enfermería deben evaluar las características del estoma y de la ostomía del paciente con el fin de adaptarse a sus necesidades y reducir el riesgo de complicaciones. Cada piel es diferente, por ellos de debe adecuar minuciosamente los accesorios que se emplean, ya que algunos pueden causar alergia al paciente o irritar más la piel al retirarlos. Además, debe esta evaluación debe incluir educación en el paciente con el fin de que sea capaz de reconocer los indicios de complicaciones y tratarlas de forma temprana y adecuada (34).
La mayoría de las complicaciones están relacionadas con el mal funcionamiento de la ostomía, la mala localización del estoma y un autocuidado no adecuado, lo que puede llegar a causar dermatitis, sangrados, prolapso, necrosis, hernias, edemas o fugas. Dentro de los principales factores estresantes podemos encontrar la irritación de la piel periestomal, que puede llegar a alcanzar porcentajes de 70%. El reconocimiento precoz de estas afecciones puede servir para disminuir las complicaciones y los costes sanitarios que implican (39,40).
Mateo JE, Mateo JE. Gestión de las ostomías en un centro sociosanitario. Gerokomos. 2019;30(3):142-6.
Las complicaciones tempranas se pueden tratar de forma conservadora, se trata de úlceras y afectaciones cutáneas que se pueden controlar con el cuidado rutinario de la piel. En el caso de que surjan hematomas o edemas, no requieren tratamiento especial. Si se produce retracción, se deberá controlar y precisará tratamiento si afecta al funcionamiento. Las causas más comunes de complicaciones tempranas son la falta de cuidado y mantenimiento adecuado de la ostomía. Las complicaciones tardías pueden tratarse también de forma conservadora o requerir tratamiento quirúrgico en el caso en que los síntomas persistan, como puede ser la aparición de una hernia. El riesgo de que surja una hernia periestomal, aumenta con factores de riesgo como son la obesidad, la realización de una segunda ostomía o infecciones que traen consigo complicaciones sépticas (37).
C. Ambe* P, Rebecca Kurz* N, Nitschke C, F. Odeh S, Möslein G, Zirngibl H. Intestinal Ostomy. Dtsch Arztebl Int. 2018;115(11):182-7.
Además de las complicaciones físicas, también se experimentan complicaciones psicológicas determinadas por los pensamientos y sentimientos negativos que los pacientes tienen sobre el miedo a la soledad, a molestar a su entorno más cercano y sentirse inferior a los demás (30).
Según una encuesta realizada, la mayoría de los pacientes entrevistados han referido no poder realizar actividades que les gustaban y practicaban previamente debido a la ostomía y también expresaban un mayor sentimiento de dependencia hacia otras personas definiéndolo como una carga para sus familiares y amigos y considerándose inferior al resto de personas e incapaces de lograr el nivel de autosuficiencia que tenían previo a la enfermedad. Es por ello por lo que uno de los tratamientos más importantes en los pacientes portadores de ostomías es la mejora de la calidad de vida. Debido a la falta de recursos, en muchos casos el seguimiento preoperatorio es difícil debido a diferentes factores, por lo que se debería fomentar el rastreo postoperatorio. Esto se traduce en una mejora de la calidad de vida, detección más rápida de las complicaciones y reducción de los costes hospitalarios que esto implicaría (31,33,36).
Duque PA, CampinoValderrama SM, Duque PA, CampinoValderrama SM. Vivencias de las personas portadoras de ostomía digestiva. Ciencia y enfermería. 2019;25:0-0.
Los pacientes portadores de nefrostomía presentan una bolsa colectora para recoger la orina, que suele ir colocada en la pierna, y para evitar obstrucciones irán al centro de salud para realizar lavados y controlar la zona periestomal. Según estudios realizados sobre la calidad de vida en pacientes con nefrostomías, la ansiedad previa al primer cambio de sonda se reduce con respecto a la que presentaban el día de la intervención, esto se traduce en un mayor conocimiento de la técnica y de la enfermedad. Es por ello por lo que las consultas previas a la colocación de la nefrostomía suponen un punto importante en el procedimiento, iniciándose ahí la educación para la salud y permitiendo al paciente expresar sus dudas y miedos con respecto a la intervención. Recae en los profesionales sanitarios la misión de elaboración de estrategias y métodos encaminados a minimizar el impacto y la ansiedad generada. Por otra parte, los portadores de una sonda de nefrostomía ven un empeoramiento de la su calidad de vida, en los casos en que no cuentan con un apoyo tanto familiar como grupo social de confianza, los datos de calidad de vida se ven disminuidos en comparación a pacientes casados o con vida familiar. Dentro de las actividades que se ven afectadas por la implantación de una sonda de nefrostomía, la que más afectación presenta son las tareas cotidianas (15).
Fernández-Cacho LM, Ayesa-Arriola R. Quality of life, pain and anxiety in patients with nephrostomy tubes. Rev Lat Am Enfermagem [Internet];27.
El solo hecho de coger un transporte público supone un gran paso para los pacientes con ostomías, y en ocasiones buscan evitar este tipo de situaciones por miedo o vergüenza ya que consideran que dejarán mal olor en el caso de que se produzca alguna clase de fuga de la bolsa de colostomía. Sin embargo, la gran mayoría de las personas ostomizadas refieren no encontrar diferencias en la realización de tareas domésticas o en el entorno laboral ya que lo definen como un ‘refugio seguro’ al sentir el apoyo de sus allegados. En cuanto a este aspecto, se observa la necesidad de extender la información no solo a las familias, si no a toda la población para favorecer la reintegración de los pacientes y su participación con normalidad en la vida tal y como la tenían (41).
La nueva condición física de los pacientes suponen un trastorno en la autoimagen por lo que es importante enfrentarse a sí mismos, conociendo su nueva imagen corporal, tratando de evitar así trastornos de la identidad (42). Es muy probable que la función sexual se vea afectada en los pacientes con enfermedades inflamatorias intestinales (EII), siendo más frecuente la disfunción sexual en mujeres que en hombres. La depresión está directamente relacionada con la función sexual. En casos en los que la intervención se realice en individuos en edad reproductiva, podría afectar negativamente a la fertilidad.
En el caso de la sexualidad masculina, afectaría provocando disfunción eréctil, cambios en el impulso sexual, excitación, libido y trastornos en la eyaculación. Generalmente no impide expresar con naturalidad las actividades sexuales, sin embargo, el hecho de que afecte a la autoestima del paciente puede hacer que aumente la inseguridad con su propio cuerpo provocando ansiedad que reduce la intimidad de la pareja. Una minoría de pacientes reestablece su actividad sexual completamente y la mayoría de ellos no lo hace de manera totalmente placentera, además refieren no haber recibido suficiente información pre/post operatoria ni durante su ingreso. Por ello es importante que en consultas posteriores se trate el tema de la sexualidad, especialmente en pacientes sometidos a cirugía rectal que sufren el riesgo de impotencia. Los pacientes experimentan limitaciones en el tema de la sexualidad que alcanzan el miedo o la preocupación en relación con el divorcio, así como experimentar nerviosismo e introversión a compartir momentos privados y exponer su intimidad a los demás. Otro de los cambios que los pacientes consideran que afecta a su calidad de vida, es la elección de ropa apropiada para minimizar la visibilidad de los equipos colectores. También está afectado el sueño, ya que, especialmente en el periodo postoperatorio inmediato, los pacientes presentan dificultades para conciliar el sueño debido a la sensación de pérdida a través de la bolsa colectora, disminuyendo así su descanso y mostrándose más irritables (30,31,43,44).
Los pacientes portadores de colostomías presentan también cambios en el ámbito laboral, muchos de ellos renuncian a su trabajo por el temor a exponerse en un entorno diferente al familiar y experimentar algún tipo de complicación como fugas, lo que aumentaría el nivel de ansiedad y reduciría la confianza en sí mismos. Sin embargo, podrían trabajar sin problema en puestos en los que no se requiera un esfuerzo físico descomunal, para ellos es importante trabajar la autoestima del paciente y extender la información sobre este tipo de procedimientos a toda la sociedad con el fin de evitar actos discriminatorios y aumentando la confianza de los ostomizados. Por otra parte, los costes de su vida diaria se ven incrementados por la necesidad de comprar material necesario para el mantenimiento de la colostomía y el precio elevado de los mismos (30).
Según un estudio realizado sobre intervenciones educativas en diferentes países, la mayoría de los profesionales que se encargan de realizar este seguimiento son enfermeros especializados en estomaterapia. Por ello es importante capacitar a un mayor número de especialistas para ejercer este trabajo de apoyo, educación y seguimiento de los pacientes con ostomías. El papel de enfermería en esta situación implica la educación del paciente con el fin de fomentar la independencia de las personas incentivando el autocuidado y la adhesión a tratamientos. Ayudarán, a su vez al manejo y cuidado del estoma mediante el uso de equipos colectores apropiados según su tipo de ostomía empleando los más eficaces según las características de las heces y modificando la dieta para reducir las flatulencias y con ello evitar los olores, también participará en el mantenimiento de sus relaciones sociales, laborales y familiares con el objetivo de disminuir los cambios en su estilo de vida. También es importante involucrar a las familias en el proceso de cambio y recibir, al igual que ellos, atención psicosocial y educativa. Dentro de las acciones preoperatorias que los profesionales de enfermería especializados en ostomías deben llevar a cabo, se encuentra la planificación y marcaje del punto de incisión. Se trata de una parte importante ya que facilita el postoperatorio y la intervención. El seguimiento telefónico es un recurso económico y sencillo que permite mantener el contacto entre los profesionales sanitarios y el paciente, aboliendo obstáculos como el desplazamiento al centro de salud o al hospital, y el tiempo empleado en la consulta (33,36,37,45).
Los pacientes consideran que dentro de las acciones y estrategias que se deben fortalecer se incluyen cuestiones técnicas que implican los autocuidados. La irrigación favorece la autonomía del paciente ya que puede controlar la evacuación, logrando así la continencia durante un periodo de tiempo. La alimentación es otro punto para tener en cuenta, ya que una dieta adecuada puede evitar complicaciones como olor, gases o aumento de las deposiciones. La higiene y cuidado de la piel periestomal, así como el manejo de la bolsa y elección adecuada de complementos, también es un tema en el que los profesionales de enfermería deben tomar parte, aconsejando al paciente sobre los más adecuados para ellos. El primer cambio de la bolsa de ostomía es considerado un momento importante tanto para el paciente como para su familia, y tiene que entenderse como la primera demostración de sus habilidades y autocuidados, si este proceso se realiza correctamente, se previenen muchas complicaciones (32,46).
Hoy en día, el objetivo es minimizar la estancia hospitalaria tras la intervención quirúrgica por lo que se reduce también el tiempo para preparar tanto al paciente como a las familias para su nueva situación. Las actividades educativas impartidas por parte del profesional de enfermería implican una mejor aceptación de la situación, incorporación de instrumentos para incrementar el autocuidado y la independencia del paciente, lo que influye directamente en la mejora de la calidad de vida. Cada vez, más personas utilizan las redes sociales para obtener información y consejos a cerca de su situación, esto puede ser contradictorio por una parte ya que pueden aumentar la desesperación al no ser del todo fiables, por ello cabe destacar la importancia de contar con grupos de apoyo que se encuentren en las mismas circunstancias ya que la información que aportan es más creíble. En estos casos, este tipo de asociaciones permiten a los pacientes expresar sus emociones y vivencias y además exponer sus dudas y miedos. En el seguimiento educativo por parte de enfermería se puede incluir el uso de tecnologías para facilitar el acceso a la población, el empleo de videos didácticos supone una ventaja para fomentar la conciencia acerca de las ostomías, combinando imágenes, texto y sonido con el fin de facilitar el entendimiento al adaptarse a la población general sin incorporar tal cantidad de tecnicismos. La creación de aplicaciones (apps) desarrolladas por profesionales de enfermería, se considera una herramienta didáctica, asistencial y diagnóstica que permite el seguimiento y fomenta el aprendizaje. Este tipo de aplicaciones son empleadas en tasas entre 45% y 85% y actualmente son más consultadas que los libros. Tienen como objetivo conseguir una evaluación individualizada y un seguimiento continuo por parte de los profesionales consiguiendo así asistir a los pacientes proporcionando medidas preventivas y abordaje terapéutico, enfocado desde el punto de vista educativo. Para elaborar este tipo de intervenciones, se requiere una previa identificación de los factores de riesgo de los pacientes y las medidas preventivas más eficaces para cada uno de ellos, así como la elaboración de un plan de cuidados terapéuticos para los pacientes ostomizados (28,32,40).
En este proceso, se determina también la importante participación de los trabajadores sociales en el caso de que los portadores de ostomías no pudieran continuar ejerciendo su actividad laboral y se encontraran en una situación económica complicada (31).
C. Ambe* P, Rebecca Kurz* N, Nitschke C, F. Odeh S, Möslein G, Zirngibl H. Intestinal Ostomy. Dtsch Arztebl Int. 2018;115(11):182-7.
La atención y apoyo especializado sobre el paciente ostomizado consigue reducir los costes económicos ya que disminuyen las intervenciones y las consultas hospitalarias, así como los ingresos por complicaciones. También permiten reducir el nivel de estrés y ansiedad del paciente y su familia favoreciendo la reintegración a su vida normal y la aceptación de su situación. Los objetivos, por lo tanto, de los profesionales de enfermería especializados en ostomías son disminuir el tiempo de espera entre el hallazgo de una complicación y el tratamiento de esta, reducir los traslados a servicios de urgencias hospitalarios y el trastorno que conlleva para su entorno, así como el aumento de costes para la sanidad. También es favorable el hecho de disponer de un profesional de referencia que realice un seguimiento del proceso y establecer un plan de educación sanitaria para el paciente (35).
La creación de guías para incrementar la información acerca de las ostomías y su cuidado en pacientes ostomizados deben incluir puntos como: Qué es una ostomía, tipos de ostomías, características de una ostomía normal, clases de bolsas de colectoras y cuidados de esta y dudas frecuentes. Deben tratarse de textos claros y fáciles de comprender por toda la población, por lo que se omitirán terminologías sanitarias complejas o tecnicismos (45).
Sena JF de, Silva IP da, Lucena SKP, Oliveira AC de S, Costa IKF, Sena JF de, et al. Validation of educational material for the care of people with intestinal stoma. Revista Latino-Americana de Enfermagem [Internet]. 2020;28.
Con el fin de facilitar la gestión por parte de los profesionales de enfermería en el seguimiento de las personas con ostomías, se procede a desarrollar un Plan de Cuidados de Enfermería utilizando para ello la guía NANDA de enfermería incluyendo aquellos diagnósticos de enfermería más apropiados para la gestión de las ostomías (47).
La figura del profesional de enfermería en estos casos es de gran relevancia para coordinar y asesorar a los pacientes en el periodo previo a la intervención con el fin de paliar o disminuir la ansiedad que se genera ante un procedimiento quirúrgico de tal calibre. Además, el seguimiento postquirúrgico favorece la reducción de complicaciones y la resolución de dudas, lo que implica incrementar el nivel de confianza y autoestima de los pacientes y el mejor manejo de la ostomía de forma independiente (48).
00078: Gestión ineficaz de la propia salud r/c déficit de conocimientos sobre su proceso actual
NOC:
00099: Mantenimiento ineficaz de la salud r/c falta de conocimientos y habilidades acerca de su proceso
NOC:
00162: Disposición para mejorar la gestión de la propia salud r/c complejidad del tratamiento y déficit de conocimientos
NOC:
00193: Descuido personal NOC:
El manejo de la alimentación es una actividad relevante en la vida de los pacientes ostomizados. Se debe modificar la dieta con el fin de evitar olores, gases y otras complicaciones, además de manejar alimentos que disminuyan las deposiciones y por lo tanto el riesgo de fugas (32).
00002: Desequilibrio nutricional por defecto r/c incapacidad para digerir alimentos NOC:
00028: Riesgo de déficit de volumen de líquidos r/c perdida importante de volumen de líquidos
NOC:
Las fugas, olores y gases suponen un tema de interés y que afecta a la confianza de los pacientes, especialmente cuando se encuentran en un entorno alejado de su familia o su zona de confort. Una correcta alimentación, evitar infecciones y mantener una correcta salud mental se puede ver traducido en una reducción de complicaciones como la diarrea o el estreñimiento (32).
00016: Deterioro de la eliminación urinaria r/c la intervención quirúrgica NOC:
00011: Estreñimiento r/c disminución de la motilidad del tracto intestinal NOC:
00196: Riesgo de motilidad gastrointestinal disfuncional r/c medicamentos y/o nutrición enteral m/p aumento del residuo gástrico
NOC:
00033: Deterioro de la respiración espontánea r/c dificultad respiratoria NOC:
00031: Limpieza ineficaz de las vías aéreas r/c retención de secreciones y/o mucosidad excesiva
NOC:
En cuanto a las actividades físicas, las personas con ostomía podrán continuar realizando sus funciones habituales siempre y cuando no supongan un gran esfuerzo que puedan implicar una afectación de la bolsa o del estoma. Sin embargo, pueden sentirse avergonzados a la hora de realizar determinadas actividades e incluso a la hora de dormir por miedo a desplazar la bolsa o dañar el estoma (15).
00095: Insomnio r/c malestar físico, estrés y/o ansiedad NOC:
00165: Disposición para mejorar el sueño NOC:
00198: Trastorno del patrón del sueño NOC:
00085: Deterioro de la movilidad física r/c disminución de la fuerza muscular NOC:
00094: Riesgo de intolerancia a la actividad r/c malestar m/p malestar debido al esfuerzo NOC:
00182: Disposición para mejorar el autocuidado r/c debilidad NOC:
00109: Déficit de autocuidado: Vestido/acicalamiento r/c debilidad NOC:
00102: Déficit de autocuidado: Alimentación r/c malestar
00110: Déficit de autocuidado: Uso del inodoro r/c debilidad NOC:
Se ha demostrado que aquellos pacientes que cuentan con información sobre su procedimiento presentan un nivel de ansiedad preoperatorio más bajo. De igual forma, la educación sanitaria favorece el postoperatorio y la reintegración a su vida normal. Por ello los profesionales de enfermería deben fomentar esta educación y seguimiento mediante la planificación de cuidados a lo largo de todo el proceso (33,46).
00126: Conocimientos deficientes r/c información insuficiente NOC:
00199: Planificación ineficaz de las actividades r/c falta de soporto familiar NOC:
Es un hecho, que tras una intervención en la que se coloca un estoma en alguna parte del cuerpo, la imagen corporal sufre un gran cambio. Por ello los pacientes deben trabajar en su autoimagen, fomentando la confianza y la autoestima. La presencia de profesionales de enfermería especializados en el tema, que puedan resolver las dudas que les vayan surgiendo, así como los grupos o asociaciones de iguales, suponen un gran apoyo que implica un aumento de la confianza en sí mismos y su nueva situación (32).
00121: Trastorno de la identidad personal NOC:
00118: Trastorno de la imagen corporal r/c tratamiento de la enfermedad NOC:
NOC:
00054: Riesgo de soledad r/c aislamiento físico y social NOC:
00153: Riesgo de baja autoestima situacional r/c deterioro funcional NOC:
La implicación de su entorno más cercano a lo largo de todo el proceso favorece el crecimiento de la autoestima de los pacientes. Por ello, los profesionales de enfermería deben incluir a su entorno familiar en la toma de contacto con las ostomías en el periodo previo a la intervención y a lo largo del postoperatorio. La extensión de información a la sociedad, implicaría que los pacientes se sintieran más integrados a la hora de retomar sus actividades sociales y laborales (42).
00060: Interrupción de los procesos familiares r/c cambio en el estado de salud de un miembro de la familia
NOC:
00052: Deterioro de la interacción social r/c ausencia de personas significativas NOC:
NOC:
Tras la intervención quirúrgica, la implantación de un estoma con su correspondiente dispositivo colector, provoca alteraciones en el aspecto físico que pueden afectar tanto al plano psicológico como al social y sexual. Los pacientes con ostomías tienden a tener una baja autoestima y sentir vergüenza de su aspecto físico, por lo que fomentar la confianza en si mismos es un punto muy importante que los profesionales de enfermería deben trabajar para favorecer la integración social del paciente. La inmersión de la familia y entorno más cercano en los procesos educativos pueden implicar un crecimiento de la confianza del paciente a la hora de mostrar su nueva imagen corporal (43,44).
00059: Disfunción sexual r/c alteración de la función corporal (estoma) NOC:
00146: Ansiedad r/c cambio en el estado de salud NOC:
00147: Ansiedad ante la muerte r/c percepción de la proximidad de la muerte NOC:
NIC:
00148: Temor r/c con cambios en el estado de salud NOC:
00069: Afrontamiento ineficaz r/c falta de confianza NOC:
NOC:
00177: Estrés por sobrecarga r/c deterioro del estado de salud NOC:
NIC:
00210: Deterioro de la capacidad de recuperación personal r/c procedimiento quirúrgico extenso
NOC:
00212: Disposición para mejorar la capacidad de recuperación personal NOC:
00158: Disposición para mejorar la esperanza NOC:
00184: Disposición para mejorar la toma de decisiones NOC:
NIC:
Las ostomías, no dejan de ser una abertura en la piel hacia el exterior, por lo que puede conllevar complicaciones. Las más comunes son las cutáneas, como consecuencia de las bolsas colectoras, fugas o alergia a algún material, causando irritaciones o infecciones. Por ello, el control y seguimiento por parte de los profesionales de enfermería, y la educación a los pacientes para que sean capaces de reconocer estos síntomas de forma precoz, puede evitar a desarrollar grandes complicaciones, al mismo tiempo que reduce costes en hospitalización o visitas a los servicios de urgencias (40).
00004: Riesgo de infección r/c enfermedades crónicas NOC:
00047: Riesgo de deterioro de la integridad cutánea r/c factores mecánicos NOC:
00044: Deterioro de la integridad tisular r/c intervención quirúrgica NOC:
NIC:
00214: Disconfort r/c síntomas relacionados con la enfermedad NOC:
00053: Aislamiento social r/c alteración del aspecto físico NOC:
Las ostomías son procedimientos cada vez más empleados para solucionar diversos problemas de salud, resultando altamente eficaces a pesar de la afectación que suponen en la modificación de la imagen corporal, de la capacidad para realizar funciones y actividades básicas de la vida diaria y la intervención en aspectos sociales y laborales, es decir que afectan en un grado alto a su calidad de vida. Además de los cambios que experimentan por la propia intervención, pueden surgir una serie de complicaciones que, dependiendo de su gravedad, afectarán también a su calidad de vida disminuyendo la autoestima de los pacientes.
El sistema sanitario no cuenta con los suficientes profesionales especializados en las ostomías. Esto supone una desventaja para todos aquellos pacientes que son intervenidos quirúrgicamente y portan algún tipo de ostomía. Se ha visto que la calidad de vida de las personas ostomizadas se ve disminuida con respecto a la anterior a la intervención ya que sufren muchos cambios tanto a nivel corporal como social y psicológico. Es por ello por lo que la presencia de una figura de referencia, en este caso hablamos de un profesional de enfermería, especializado en ostomías, para seguir el proceso desde el preoperatorio hasta el postoperatorio, es de vital importancia para mejorar la autoestima de los pacientes y permitirles lidiar con las complicaciones que puedan ir apareciendo como consecuencia de la ostomía, lo que implica una detección precoz y tratamiento anticipado de las mismas.
En el preoperatorio, los profesionales de enfermería deberán elaborar un plan de atención y educación en el que se expongan todos los datos acerca de la intervención explicándole al paciente cuales son las complicaciones que puede sufrir y preparándole para los cambios que va a experimentar. En este momento es importante la participación de su entorno familiar y de amistades, para que cuente con el apoyo adecuado en todo momento, al mismo tiempo que ellos se informan a cerca de la situación para poder unir su ayuda en los momentos más difíciles. También se encargará de establecer la localización del estoma para proceder posteriormente a implantarlo. Una colocación adecuada puede favorecer al manejo de la ostomía permitiendo una mejor higiene de esta y por lo tanto reduciendo el riesgo de fuga y como consecuencia disminuyendo las complicaciones cutáneas periestomales como infección o irritación.
Durante el periodo posterior a la intervención, los pacientes necesitan continuar con el seguimiento y con los cuidados. Por ello, tras el alta hospitalaria, los profesionales de enfermería se encargarán de realizar un seguimiento minucioso de los pacientes elaborando planificaciones de intervención con el fin de detectar de forma temprana las posibles complicaciones que puedan surgir, estableciendo un tratamiento precoz para paliarlas, reduciendo así las visitas a los servicios de urgencias y las hospitalizaciones. Además, se encargarán de aconsejar a los pacientes respecto al tipo de material más apropiado para ellos en función de las características de su ostomía, seleccionando las bolsas colectoras más apropiadas y demás complementos para evitar fugas, roces, alergias o irritaciones.
Es por ello por lo que la atención por parte de los profesionales de enfermería desde el periodo previo a la intervención, hasta el seguimiento postoperatorio, supone un beneficio para el paciente. Está demostrado que aquellas personas ostomizadas que tienen mayores conocimientos e información acerca de su situación, tienen un nivel de vida superior. Por ello la presencia de un profesional de referencia al que poder acudir en caso de dudas y que sea conocedor de su situación, supone un beneficio no solo para el paciente y su entorno, si no también para el sistema sanitario en sí, disminuyendo los elevados costes que suponen la hospitalización o reintervención de un paciente.
La importancia en el ámbito clínico se reduce a tratar de minimizar las complicaciones que los pacientes con ostomías presentan, con esto se busca lograr un menor número de ingresos hospitalarios que aumentan la ansiedad y estrés tanto en los pacientes como en su entorno, afectando en mayor medida a su autoestima lo que se ve traducido en una afectación a su vida personal y laboral.
Por ello, la incorporación en los centros de salud de profesionales de enfermería que permitan seguir la evolución de los pacientes ostomizados favorecerá el proceso, minimizando costes e ingresos que se pueden evitar con una detección pronta de las complicaciones.
Las asociaciones de personas ostomizadas, también favorecen el aumento de la autoestima de los pacientes ya que además de poder exponer sus dudas a otros pacientes con su misma situación, podrán abrirse y expresar sus miedos lo que ayuda para reducir el estrés y ansiedad.